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El Encuentro Conmigo

Instagram: @AndreaVillate_Cielos

 

Hace unos días vi en una de las historias de Instagram que alguien preguntaba “Si te encontraras a tu yo de 10 años, ¿qué le dirías?” y me la he pasado haciéndome esa pregunta…

Pero antes de escribir lo que le diría a mi Yo de 10 años, comencé a pensar acerca de los sueños que tenía en esa época, por aquello que uno de niño todo lo ve alcanzable, no tiene límites ni cuestionamientos, no repara en pensar si ser bailarina, cantante, poeta, escritora, bombero, médico, entre otras era una profesión rentable.  Cuando a uno le preguntaban qué quería ser cuando grande, uno respondía de la manera más natural porque el mundo era lleno de oportunidades… a medida que crecemos es que los limites comienzan a llegar y a enfrentarse a la realidad, que por mucho que uno desee algo y se prepare para ello, no indica que lo vaya a lograr.    Siempre hay una fuerza, que yo le llamo destino, que nos va trazando los caminos por los cuales debemos caminar.

Hay cosas de pequeños que nos marcan lo que vamos a querer ser cuando grandes. Yo tuve la fortuna de tener unos papás que siempre apoyaban nuestros gustos. Mi papá decía que uno debía elegir la carrera que realmente le gustara y lo demás vendría por añadidura.

Una de las cosas que yo quería ser cuando grande era estar en la mesa de trabajo de un programa de radio.  En ésa época escuchamos Caracol Radio mientras mi papá nos llevaba al colegio y a veces escuchábamos el Zoológico de la mañana en 88.9.  Aunque mi papá decía que esos programas eran muy tontos, nosotras nos reíamos mucho.  Para mí la radio era magia. Una tarde mi papá llego con un equipo de sonido de última tecnología para la época, que se podía grabar de cassete a cassete, tenía tres micrófonos, mejor dicho era la entretención para nosotras. Mi papá lo había comprado pues estaba estudiando periodismo por hobby y le encantaba la locución, tenía una voz maravillosa, así que ahí practicaba, se grababa leyendo noticias, extractos de libros  y a mi me  gustaba mucho escucharlo.    Mi ilusión siempre era trabajar en radio, hacía libretos de programas radiales, con un play list maravilloso, donde no podía faltar Luis Miguel, Las Flans, Chayanne, la música en inglés de los 80s, entre otros.  Con mi pensamiento futurista un día decidí que quería micrófonos inalámbricos, para poder poner cada uno en mi escritorio para los invitados imaginarios que tendría en cabina…  Y pues le corte el cable a los tres micrófonos.   Yo pensé que igual seguirían funcionando pero no.  Cuando mi papá llegó no me regañó, solo me atino a preguntar por qué lo había hecho, así que le mostré que quería inalámbricos y le mostré mis libretos del programa. No me regañó, me acaricio la mejilla con ternura y me explico pues que los había dañado pero que ya qué, que jugara con esos que él conseguiría otro micrófono.

La niñez es eso… creer que todo es posible y al recordar esa anécdota pensé en la paciencia que tienen los padres con los hijos.

Tal vez a mi yo de 10 años le advertiría pasar de largo al conocer a algunas personas que dejaron grandes heridas en el corazón.  Creo que todos en algún momento nos hemos topado de frente con el desamor, con la ingratitud, con la falta de solidaridad y con personas que se han aprovechado de la buena fe, que lo buscan a uno solo cuando necesitan  algo.

Mi Yo más sabio y tal vez menos ingenuo le diría a mi Yo de 10 años:

Trata de no perder el tiempo en cosas y personas que no lo merecen. Practica algún deporte desde ya, porque si no inicias ya luego no vas a querer hacerlo.  Debes ser muy  fuerte, pasarán cosas que te pondrán triste, como la muerte de seres que amas, pero vas a salir adelante, harás las paces con las ausencias y volverás a sonreír.

Debes administrar mejor el dinero, date gusto, pero piensa en el futuro.  Debes asumir las pérdidas, entender que si algo no es, no es, eso te ayudará a superar más rápido las situaciones que vas a vivir y podrás seguir adelante.  La vida no se va a detener por nada, el sol seguirá saliendo en las mañanas y la luna y las estrellas de noche.

Nunca un día volverá a ser igual que otro.  La aceptación te llevará por un camino donde encontrará tranquilidad y equilibrio.  Debes luchar por lo que quieres pero entendiendo que sea cual sea el resultado hay que seguir hacia adelante.   Te encontrarás en el camino con mucha gente, algunos serán amigos, con otros solo vivirás momentos gratos de amistad.  Hay personas que estarán en tu camino, otras serán solo una estación, así como tú serás para algunas personas una estación y en otras todo un camino.      La prioridad en la vida son tus seres más amados, no solo quiérelos sino demuéstraselos con tu presencia, préstales atención, escúchalos y nunca des por hecho su presencia.   Aunque vas a tener que renunciar a los sueños más importantes que tienes, vendrán otras cosas y aunque no será lo que esperas, será divertido.   Y recuerda, hay cosas que no están en tus manos, ni tu ni nadie puede pelear con el destino.

 

Esta pregunta me recordó la película “The Kid”, protagonizada por  Bruce Willis… que al encontrarse con su yo de pequeño comienza a descubrir muchas cosas que quería hacer cuando era niño y de grande no quedaba ni la sombra de lo que fue… En una escena le pregunta a una desconocida que se encuentra en un avión, qué le diría si se encontrara a su yo de 10 años?  Y ella responde – Le diría, Vive, todo estará de maravilla-

Y tú, ¿qué le dirías a tu Yo de 10 años?

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