Relaciona2

Publicado el

Reto #3: ¿A quién le quieres dar las gracias?

Andrea Villate, Periodista.

 

Hace un tiempo uno de los mejores hospitales del país sufrió una crisis financiera por recaudo, es decir, facturaban muy bien, pero las aseguradoras no estaban pagando a tiempo, lo que obligó al hospital a tomar medidas. Como estrategia para tratar de manejar la crisis tomaron la difícil decisión de recortar la nomina y realizar varios ajustes económicos al interior que generó un alto nivel de preocupación entre sus empleados.  Esto provocó que los colaboradores dudaran de si era importante o no su labor.

Esta situación coincidió con el mes de los Cuidados Paliativos y los directivos del hospital muy preocupados por ver a sus colaboradores tan desanimados y tristes, tuvieron la idea de realizar una charla que se llamara “La vida después del hospital” con el objetivo que los pacientes y sus familias le agradecieran a todo el personal del Hospital lo que han hecho por ellos.  Y todos los empleados, médicos, enfermeras, señoras de la cocina, camilleros, personal administrativo y de servicio se dieran cuenta de lo importante que es su trabajo.

En la charla salió la imagen de don Gustavo, un paciente con cáncer de colon, llevado a cirugía con múltiples complicaciones, que permaneció hospitalizado mucho tiempo, luego se recupero, fue dado de alta y su familia les agradeció enviándoles el video de cómo transcurría su vida después de ser dado de alta del hospital, bailando su música favorita y que gracias a todos los cuidados tuvo calidad de vida hasta el final.   Fernando, un paciente con mieloma múltiple, en etapa final de vida, les agradece, entre lágrimas, en un video la atención y el cariño con que fue tratado por todos en el hospital.

Y así con muchos videos y fotos fueron llegando los agradecimientos. Los colaboradores del hospital recordaban a cada uno de esos pacientes.  Alguien mencionó, “Yo le llevaba la comida a don Gustavo y siempre me recibía con una sonrisa”.  Otro decía, “Yo recuerdo a la familia de don Fernando, era muy amable”. Una enfermera recordaba que a don Francisco le llevaba los medicamentos y así, con muchos pacientes. Algunas lágrimas rodaron por las mejillas de las enfermeras, camilleros, médicos, personal administrativo y de servicios, entre otros. Todos tuvieron que ver con el bienestar de esos pacientes. Y al ver que, aunque muchos pacientes ya no están, sus familias les agradecen por cada acto de bondad que tuvieron con sus seres queridos.

Pasó el tiempo rápidamente y la crisis fue superada, todo volvió a la normalidad, menos sus empleados. Nunca volvieron a ser los mismos, se dieron cuenta de la importancia que era el trabajo que desempeñaba cada uno en el Hospital, que lo que hacían era muy valioso.  El poder del agradecimiento.

Cuando la doctora Paola Ruíz, médica especialista en Geriatría y Cuidados Paliativos del SES Hospital de Caldas, en Manizales, (lugar donde ocurrió  esta historia), y presidente de la Asociación de Cuidados Paliativos de Colombia (ASOCUPAC) me hablaba sobre esto, sus ojos brillaban de emoción.  El impacto que puede tener el agradecimiento de una persona hacia otra es algo asombroso, de mostrarle el valor tan inmenso que tiene lo que hace y la forma en que lo hace.  De esta historia me encantó que cuando ella hablaba de los pacientes, se refería a ellos por su nombre y los recordaba con un gran cariño y compasión, con una cercanía tan sublime que representa lo que realmente es la medicina:  ver a otro ser humano.

Esta experiencia tan bonita me hizo caer en cuenta de varias cosas:

El agradecimiento desde el corazón, hacia otra persona, tiene un poder maravilloso de darle un sentido a lo que hacemos día a día.

Debemos agradecer a las personas que están con nosotros, que nos cuidan, que nos acompañan, que se toman el tiempo para estar a nuestro lado, (familia, amigos, compañeros de trabajo y todas las personas que nos cruzamos, etc.) nos están regalando tiempo, algo que nunca van a recuperar.

Muchos de los pacientes que participaron en esta actividad ya no están. Antes de irse dieron las gracias, no solo a quienes los cuidaron, también a sus seres más amados.

El reto que me propongo esta semana y al que los quiero invitar es precisamente: ¿A quién le quieres dar las gracias?

Quienes han leído mi blog y que muy amablemente lo comparten, saben que siempre (o casi siempre) toco el tema de la muerte, porque creo que es lo único fijo que tenemos en la vida. No sabemos cuándo será nuestra última navidad o la de nuestros seres más amados. Así que, a darle rienda suelta al amor, ha abrazar, a cuidar, no escatimar en demostrar el amor a quienes queremos y darles las gracias.

Si esta fuera su última navidad, ¿A quién le daría las gracias?

En Twitter: @AndreaVillate 

[email protected]

Comentarios