Por: MANUELA RESTREPO SILVA (@manurs13)
Ya hemos comenzado a percibir como de repente en Medellín todo el mundo habla y todo tiene que ver con el Foro Mundial Urbano –WUF7. Este evento internacional, propiedad de Naciones Unidas para el programa de asentamientos humanos – UN HABITAT, que se llevará a cabo en nuestra ciudad entre el 5 y el 11 de abril, es catalogado por expertos en urbanismo como la principal conferencia mundial en ciudades y se espera que cuente con alrededor de 10.000 participantes.
En esta época donde todo lo valioso debe estar relacionado con innovación e internacionalización, el hecho de tener reunidos en la misma ciudad a personalidades de más de 120 países durante una semana puede significar, para muchos, la cúspide en términos de posicionamiento y desarrollo, sin embargo, vale la pena tomarse un minuto y reflexionar sobre eso que estamos esperando que un evento como estos le deje a Medellín.
La principal expectativa gira en torno al posicionamiento de la ciudad como referente en temas de urbanismo y sostenibilidad, además de esperar también que esta sea la plataforma para que se realicen alianzas estratégicas con cooperantes, empresarios e inversionistas internacionales que le permitan obtener financiación para sus macro proyectos.
Desde el punto de vista económico, la organización del evento coordinada desde Nairobi por UN HABITAT y gerenciada a nivel local por la Alcaldía de Medellín, ha dispuesto un presupuesto cercano a los 10 millones de dólares, de los cuales 6 millones y medio (aproximadamente 12 mil millones de pesos colombianos) serán aporte del municipio, según su Gerente, Ricardo Arango, y de los cuales se espera un retorno de alrededor de 10.000 millones de pesos.
Este significativo presupuesto, cercano al que el municipio destinó para carteras como la de la Secretaría de la Mujer en el 2014, el doble de lo que invertirá en Juventud en el mismo año, y más del doble de la inversión en fortalecimiento del sector cultural[1], pretende posicionar a Medellín como líder mundial en desarrollo urbano.
Sin embargo, el diseño de la agenda del evento y la organización del mismo se ha caracterizado por su hermetismo y lejanía con la ciudadanía, esa misma que pone los recursos para que este se realice. Al evento ser propiedad de Naciones Unidas, son ellos quienes han puesto la agenda y direccionado las temáticas, ellos han escogido los ponentes y los temas principales…y al ciudadano, centro de esa urbe, nadie le preguntó.
La participación de los colectivos culturales y sociales en su diseño y orientación ha sido mínima, los eventos introductorios al Foro han sido aislados y sin mucha divulgación y lo único que sabemos, los que no estamos involucrados en su organización es que vendrá gente muy importante a hablar de temas muy importantes.
Y es que el Foro Mundial Urbano no es un evento de tan alto impacto como se ha presentado, a pesar de la alta afluencia de participantes y lo que esto significa en términos de economía local, su público se compone de altas personalidades de nivel internacional y sus temáticas, en ocasiones tan técnicas que se hacen lejanas al ciudadano.
En sus anteriores versiones el WUF ha intentado aprovechar dicho tecnicismo y dichas personalidades para solucionar temáticas como pobreza y ciudad, desigualdad, inequidad y daño ambiental, sin embargo estos son recurrentes año tras año, lo que supondría o falta de interés de los participantes en el Foro por aplicar las decisiones que allí se toman o ineficacia de este espacio como medio de democratización de las decisiones de Naciones Unidas.
Como está el panorama entonces, no soy muy optimista sobre lo que le pueda dejar a la ciudad esta altísima inversión (inclusive desproporcionada) y sospecho que se convertirá en una reunión más a la que asisten personajes que tienen como función/hobby asistir a reuniones internacionales, se tomarán la foto respectiva y volverán a sus países de origen a seguir administrando ciudades de la manera como se ha hecho hasta el día de hoy, teniendo como base la pobreza, la inequidad y el daño al medio ambiente.
Pero como soy de aquí, tengo que reconocer también que Medellín ha tenido siempre la habilidad para apropiarse de estas oportunidades y convertirlas en un impulso a su desarrollo y que gran parte de la transformación de esta ciudad ha sido gracias a su internacionalización, por lo tanto, asistiré al WUF, intentaré enriquecerme con el conocimiento de estas personalidades y esperaré paciente para reconocer los beneficios que le quedaron a la ciudad. Le voy a dar el beneficio de la duda.
Nota: Una responsabilidad muy grande tiene Medellín al recibir un evento internacional acerca de desarrollo urbano, cuando debido a los recientes incidentes en varias construcciones de la ciudad, la ética en el sector de la construcción está tan cuestionada.
[1] Ver Decreto 2503 de diciembre 17 de 2013, por medio del cual se liquida el presupuesto general del municipio de Medellín para la vigencia fiscal 2014
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