Muchos de los logros y desarrollos actuales en TI probablemente serían impensables sin la diversidad en el lugar de trabajo.
Reunir a personas de diferentes orígenes, con experiencias únicas y diferencias individuales, crea un lugar de trabajo moderno, dinámico e innovador. Sin embargo, en este ambiente laboral aún falta camino por recorrer para lograr la diversidad, inclusión y equidad dentro de las organizaciones. Y, si queremos acelerar el cambio en este sentido, las empresas deben definir estos objetivos como parte de su estrategia de negocio y conseguir que los líderes asuman su responsabilidad con la creación de un ambiente laboral diverso como parte de la cultura de la compañía.
Según un estudio liderado por Stefanie K Johnson, profesora de la Escuela de Administración de la Universidad de Colorado y autora del libro Inclusify, los equipos diversos toman mejores decisiones, sin embargo, aquellos equipos diversos con alta inclusión toman aún mejores decisiones, pues está demostrado que resultan más eficientes hasta en un 60%.
Según la experta, la inclusión reduce el conflicto, las emociones negativas y la rotación. Adicionalmente, cuando se suman todos los beneficios de la inclusión, los equipos más inclusivos superan a los demás por 8 a 1.
Por su parte, el sentido de pertenencia también afecta a la productividad. Harvard Business Review indica que los colaboradores que tienen un mayor sentido de pertenencia trabajan más y están más comprometidos. De hecho, las investigaciones muestran un aumento del 56% en el rendimiento laboral y una reducción del 75% en los días de baja por enfermedad entre aquellos que se identifican altamente con la empresa donde trabajan.
Entonces, formar equipos con un grupo diverso de empleados trae diferentes perspectivas, experiencias, habilidades blandas y duras a la mesa que permiten a las empresas analizar los problemas de los clientes con mayor previsión y desarrollar soluciones más creativas, individuales e innovadoras. De este modo, las corporaciones pueden atender a una base de clientes más amplia, que a su vez será tan diversa como su fuerza laboral.
Cerrando la brecha de género
Una parte importante de fomentar la diversidad en la fuerza laboral es garantizar la igualdad de género. Las empresas deben ofrecer las misma oportunidades profesionales para todos, lo que significa acompañar a sus colaboradores en su trayectoria profesional individual con flexibilidad y apoyo personal y profesional.
En las empresas de TI más grandes, alrededor del 28 por ciento de los trabajadores son mujeres. Un porcentaje aún muy bajo, por lo que es importante continuar trabajando activamente para aumentar la proporción de mujeres en la industria. Debemos impulsar el cambio alentando a las ejecutivas a asumir puestos en la industria de TI y abogando por el liderazgo femenino en las corporaciones. Para esto es importante trabajar arduamente a nivel colectivo sobre sesgos, estereotipos y barreras en torno a la diversidad de género.
Celebramos entonces, con bombos y platillos la diversidad como un camino inclusivo y multicultural, que nos invita a repensar la empresa como escenario para el desarrollo humano, donde las diferencias generan valor y nos unen para alcanzar juntos el éxito: el de los individuos que componen nuestra fuerza laboral y el de la empresa que los aglutina dentro de los objetivos del negocio.