Los que sobran

Publicado el @Cielo _Rusinque

Ciudadanías libres por la Justicia

#ColombiaEnPazSinElFiscal

Las Ciudadanías colombianas por la justicia queremos agradecer a quienes nos han apoyado en nuestra iniciativa de salir de las redes a la calle a manifestar nuestra inconformidad con la permanencia de Nestor Humberto Martinez en la Fiscalía, a pesar del daño que con ella está causando a la institucionalidad y la justicia colombiana.

La idea de los plantones surgió como mecanismo espontaneo de organización ciudadana, con la intención de canalizar la indignación de los colombianos sobre aspectos puntuales como la exigencia de renuncia del Fiscal, sin pretensiones electorales y más allá de tendencias ideológicas o partidistas, siendo nosotros ciudadanos políticamente diversos.

Observamos con gran preocupación en medio de la coyuntura política que vive Colombia, la dificultad de los partidos alternativos para articular la oposición y la falta de garantías institucionales para resolver varias de las crisis que han venido surgiendo en lo que va corrido del año. Comprendemos la preponderancia que en política se le puede estar dando al calendario electoral, pero consideramos nuestro deber seguir acompañando la ciudadanía en su legítimo derecho a manifestarse y resistir ante las acciones y omisiones de un gobierno que pone en peligro los principios fundamentales de una democracia.

Para el primer plantón logramos conformar un grupo amplio en la red que permitió posicionar nuestra convocatoria y hacerla trascender a los medios de comunicación tradicional; radio, TV y prensa. No fue fácil formar un equipo sólido con personas con “algo en común” pero con intereses, modos de actuar y estilos diversos. Convocamos líderes y activistas, pero no hubo mutuo reconocimiento entre los visibles y los que no estaban interesados en figurar.

Hubo dificultad por parte de algunos miembros del grupo en adaptarse a un sistema de organización en el que todas las voces valían en la misma medida sin importar la popularidad o no detentada en la red o la pertenencia o no a algún grupo político. Tratándose de un grupo de identidades políticas diversas la persistencia de uno de los miembros, en varias oportunidades de imponer una agenda y marca partidista a nuestra iniciativa logró entorpecer “en parte” la segunda convocatoria.

A pesar de estos inconvenientes internos, el éxito de la 1ra convocatoria mantuvo su eco y logró atraer a los líderes y políticos alternativos para la segunda.  Sin embargo, el atentado que sufrió Bogotá el 17 de enero, las confusiones generadas por la fecha alternativa propuesta al exterior de nuestra convocatoria para el 31 de enero, así como la marcha convocada después del atentado, invisivisibilizaron suficientemente la iniciativa y mermaron el fervor ciudadano que se había logrado para la primera.

Con el grupo dividido, la pérdida de eco y distracción de la ciudadanía en las coyunturas cotidianas, persistir en un platón al corto plazo era un riesgo para quienes apoyaban la causa pero que privilegiaron el momento electoral y para quienes habían asumido la necesidad de movilizarse  sin trascendente conciencia y compromiso.  La crisis en Venezuela, la amenaza de una guerra concentró durante días la energía de todos los sectores mediáticos, políticos y ciudadanos, cada escándalo por los desatinos del gobierno logró invisibilizar la punta del ice berg de la corrupción política colombiana, que nosotros seguimos focalizando en el Fiscal General, pues es quien está encargado de dirigir las investigaciones que permitan dar con los responsables de los diferentes males que aquejan nuestra sociedad, dentro de los cuales la corrupción es uno de los principales.

Mientras la oposición fragmentada parece concentrada en las próximas elecciones, la indignación ciudadana más allá de las preferencias políticas ha ido quedando sin soporte moral que facilite su estructuración para ser tenida en cuenta.

Los colombianos penan en asumir que su voz es valiosa y se encuentran ávidos de liderazgos que sepan canalizar sus descontentos hacia un ejercicio de veeduría y control político eficaz. El abandono a la ciudadanía en las causas que los identifican también fomenta su apatía a la política y podría acrecentar el abstencionismo.

Por lo anterior, queremos invitar a los ciudadanos y a los políticos que consideren que las reclamaciones que pretendamos canalizar sean válidas, a que nos acompañen a visibilizar las denuncias y actividades que como ciudadanos pretendemos orientar. Estas actividades estarán enfocadas en incentivar el ejercicio de los derechos fundamentales y democráticos, y en canalizar el descontento ciudadano hacia la consecución de fines concretos para la defensa de la institucionalidad como: la renuncia del Fiscal, la lucha contra la corrupción, la objetividad, integralidad y transparencia de las investigaciones penales,  la exigencia de garantías para los líderes sociales y las libertades y derechos ciudadanos, el establecimiento de responsabilidades por el crimen ambiental generado en Hidrohuitango, así como la exigencia al gobierno nacional de brindar garantías para la consolidación del proceso de Paz y cumplir los compromisos a través de él adquiridos por la institucionalidad colombiana y ante la comunidad internacional.

La ciudadanía está llamada a aportar sus ideas y a acompañarnos a persistir, resistir y no desistir en nuestro cometido de seguir aportando luz a la justicia colombiana en estos momentos de confusión y oscuridad. Sígannos y los seguiremos a través de nuestras páginas de #CiudadaníasporlaJusticia que estarán desde hoy disponibles para facilitar nuestra comunicación en Twitter : @ciudadaniaspor1  y Facebook: Ciudadanía Justicia. ¡Junto a ustedes seguiremos adelante aportando #LuzPorLaJusticia

De ustedes,

Leila Carolina Chujfi, Cielo Rusinque, Fabian Sanabria, Andres Charry, Francisco Castaño Erazo, Juan Trujillo, Celso Tete Crespo, Stefanny Adelaida Silva Arturo Martinez Ochoa, Liliana Escudero, María Niny Echeverry, Lidy Ramirez Palencia, Octavio Lopez Sierra, Gener Usuga, William Niño, Maria Tegui, Alejandra Dulcey Mejia, Diana María Diaz.

 

 

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