Circula por ahí un meme diciendo: En estas fiestas podremos tener contacto con máximo 10 personas sin problemas. ¿Pero dónde voy a encontrar 10 personas sin problemas?
Sí. Nuestro grave y urgente problema ahora son LOS CONTACTOS. Necesitamos abrazos y besos. Diálogos, debates, discusiones. Más encuentros y reencuentros.
Pero sometidos al miedo coronavírico se nos recomienda lo contrario: ¡el distanciamiento! Y prorrogan la pandemia hasta el 2021
¿Cómo resolver esta contradicción? ¿Prohibiendo? ¿Más policías entrando a nuestras casas?
Cuando todas las voluntades se mueven a buscar contacto, la salida no es prohibirlo. Basta con negociar reglas de juego y cumplirlas.
La mejor de todas puede ser aplicar la burbuja. Reunirse con personas de las que conozcamos antecedentes de comportamiento y salud. ¡Pero reunirnos!
Unos y otros necesitamos con urgencia contactos. Abrazos. Diálogos. Discusiones. “Adelantar cuadernos”.
Curiosamente, contacto significa polarización. Activación de los polos, de las energías, de las chispas vitales[i].
Pero mientras en familia buscamos el contacto, en política no lo queremos. Le tenemos miedo a la polarización. Queremos distanciamiento.
Le tenemos miedo a que discutan Fajardo y Petro; le tememos -con razones- a que se separen Fajardo y Robledo; o a que López no sea capaz de unir o crear nuevas minorías.
Olvidamos perversamente que la no polarización, que el distanciamiento político, sólo le conviene a la secta fascista. Separándonos, dividiéndonos y aislándonos, la secta podrá seguir dividiendo para reinar.
No resulta gratuito que en Colombia, el estado de emergencia por pandemia haya sido prorrogado hasta el 2021.
Los miembros de la secta fascista no suman ahora, lo mismo que ayer, más del 15% de la opinión política. ¡Triunfan dividiendo! Despolarizando. El Covid 19 ha sido su más perverso aliado.[ii]
Por ello avivan el miedo al debate, al diálogo, a la discusión. Por eso cunde el temor a que se enfrenten las opiniones contrarias.
La polarización no les conviene porque no saben negociar sino imponer; no saben dialogar sino conversar. Y a esto, cínicamente le llaman ¡Estado de Opinión![iii].
Están sembrando el miedo a los bloques contrarios de opinión. A elecciones que se resuelvan por escasos votos. Miedo al contacto político. Miedo a la polarización.
Nos convendría estimular en política lo que estamos haciendo socialmente. Estimular los contactos, los roces, los debates. En las familias, los talleres y en las escuelas, ¡necesitamos polarización![iv]
Estimular todos los mecanismos que permitan crear nuevos partidos, movimientos, ONGs, escuelas y redes sociales.
Impulsar la polarización significa avivar la crítica que es el mejor contrincante de la secta fascista. Es imperativo demostrar que el proyecto fascista desde hace 20 años «se nos vino por todo”.
La secta contabiliza 20 años separándonos. Dividiéndonos. Manipulando la Justicia. Garantizándose el auto control civil apropiándose de las ías (Fiscalía, Procuraduría y Contralorías).
Por ello cuando firmamos la pacificación con las FARC, logró que masas de ovejas emberracadas votaran a ¡favor de la guerra! (¿A dónde tienen escondido al Vélez que denunció la treta?…).
La secta vino a disolver el diálogo. A imponer dictatorialmente la forma de hacer periodismo, cultura, radio y televisión.
No resulta gratuito que el arrendatario de la Casa de Nariño se esté graduando ahora como mediocre presentador de televisión.
Es lo que mejor saben hacer los fascistas. Aparecer en pantalla. Impactar desprevenidos. Ser “solidarios con las víctimas” mientras Ejército y Policía manipulan contratos millonarios. ¡Nuestros Héroes!
Teleduque se aprovecha del dolor de las víctimas para mejorar en las encuestas. La pantalla le sirve para utilizar las lágrimas ajenas como eficaz herramienta politiquera[v].
Todos los días Teleduque afianza el proyecto divisorio. Afianza la manipulación como herramienta. Afianza la limosna como mecanismo de dominación social.
Todos los días, a nombre de la patria, se quieren quedar con ella. A nombre del nacionalismo, quieren dejarnos sin nación. Y a nombre del “odio al socialismo”, quieren dejarnos sin sociedad.
Congótica. Por ello Teleduque ha prorrogado hasta Febrero 2021 el estado de emergencia de la pandemia.
Congótica 2. Teleduque quiere continuar su proyecto manipulador arropándose en una pandemia que ya tiene vacuna, para inyectarnos otros mesecitos más de juego sucio fascista. ¡Ojo con el 22! dijo el cabecilla.
Congótica 3. ¡Gracias Trump! Has sido el mejor ejemplo del fascismo que se inocula dentro de las fibras de la Democracia. ¡Gracias Partido Republicano! (Viejo, pero nada grande).
[i] https://blogs.elespectador.com/politica/bernardo-congote/usted-nos-convendria-una-mayor-polarizacion
18 octubre 2020
[ii] Cárdenas, M. (2020). “El país no está polarizado”. Diario El Tiempo, Octubre 31, Pg. 1.15.
[iii] http://blogs.elespectador.com/politica/bernardo-congote/estado-fascista-sin-opinion
18 junio 2019
[iv] https://blogs.elespectador.com/politica/bernardo-congote/me-declaro-persona-no-grata
6 diciembre 2020
[v] https://blogs.elespectador.com/politica/bernardo-congote/despolarizar-eliminar-fracturar-matar
5 noviembre 2020