Match Tenis

Publicado el Andres Vargas

NADAL NO ES NADAL

Fabián Valeth Orozco @FabianV_:

Mas información en: Matchtenis.com

Síguenos en Twitter: @Matchtenis

Foto: Getty Images
Foto: Getty Images

En estos momentos Nadal no es Nadal. Es simplemente notar su postura en algunos partidos de este curso, retroceder la videocasetera para ver que la desazón de 2014 sí hizo algún efecto en el español que hoy vemos.

Nadal no es Nadal porque se le han escapado partidos que antes no se iban por el drenaje. Casos particulares ante Michael Berrer en Doha, Fabio Fognini en Río o Milos Raonic en Indian Wells. No es que el español no podía -o debía- perder estos encuentros, todo tiene un contexto más amplio y surge por las situaciones que ha atravesado para terminar siendo derrotado. En esos ejemplos parecía tener el duelo controlado, estar a dos pasos del triunfos y al final todo se terminó yendo por la borda. Desconfianza, nervios, el rival levantó el nivel…

Nadal no es Nadal porque no podemos confiar en que tiene las mismas piernas de hace algunos años atrás. El balear nos acostumbró a partidos tan extraordinarios donde sus defensas parecían ser de otra galaxia, donde no le importaba correr de una lado a otro para impactar una vez más la pelota. La armadura con el tiempo se va oxidando. Y Rafa no abandona su patrón de juego que lo llevó al éxito, ese es su ADN; no podemos pedirle que juegue como Federer o Djokovic. Ese es su estilo innato.

Nadal no es Nadal porque ante Fernando Verdasco, en la tercera ronda del Masters 1000 de Miami, demostró que en los momentos claves no es el mismo caballo de batalla, que no siente la misma intensidad de tiempos tan mozos, que no elige las mejores opciones para poder dar el golpe de gracia a su oponente. «Es algo que no me ha pasado durante mi carrera, he sido capaz de controlar la situación y las emociones durante el 95% de mi carrera, pero ahora me está costando mucho». El tres del mundo fue directo en su conferencia de prensa post derrota, aunque reconociendo que los nervios ya los había sentido antes pero no durante varios juegos seguidos.

Y es que Nadal no es Nadal por tema de lesiones porque eso ya es cosa del pasado. En esta temporada no sabe lo que es tener alguna dificultad física, pero sí está atravesando ese proceso de recuperación de confianza luego del fatídico final de año pasado, donde la muñeca y apéndice fueron una tortura para el cuerpo del exnúmero uno del mundo. «Los problemas físicos son pasado (…) Noto cansancio y tengo la sensación de que no tengo esta confianza en mí mismo, responder la bola y saber dónde tendré que moverme o qué hacer».

Pero Nadal puede volver a ser Nadal. Nadie ha sentenciado que este es el fin de la carrera del español más exitoso de la historia, hay tiempo para encontrar las fallas y establecer las soluciones para esta ‘racha negativa’. Ahora viene la temporada de arcilla donde históricamente se ha hecho fuerte, ha visto sus mejores resultados y donde puede encontrar mayor ritmo para sentirse en condiciones óptimas. «Voy a seguir trabajando, espero que la tierra batida ayude, a medida que gane más partidos las dudas desaparecerán».

¿Quién no quiere que Nadal vuelva a ser Nadal? Por más fanatismo existente, ¿quién no ha disfrutado esas extensas batallas con Djokovic o Federer? ¿Quién no se quedó pegado al televisor o nunca se paró del asiento al vivir en vivo un encuentro de esta magnitud? Rafael puede volver sentirse el mismo de antes aunque no sea en dimensiones iguales a las del pasado. Es un aspecto mental, es una batalla que se libra en su cabeza. Y él mismo da su grito de batalla: «Voy a solucionarlo. No sé si tardaré una semana, seis meses o un año pero voy a arreglarlo».

Comentarios