Ciclismo con J

Publicado el Jhon Jaime Osorio

Vuelta 2022 – Día 5: Soler levantó sus alas para que España volviera a ganar

Marc Soler parecía tocado por un Ángel. Saltó desde la fuga en el último ascenso de la etapa 5 de la Vuelta, cruzó el Alto del Vivero con solo 12 segundos de diferencia frente a quienes habían sido sus compañeros en la fuga, y se sostuvo al frente los 14 kilómetros del descenso hasta la meta. No pudieron alcanzarlo. Lo tuvieron a 6 segundos. Soler se mantuvo. No declinó; aguantó hasta ganar la etapa.  Cruzó la meta y acabó con una racha de más de 2 años que tenían los ciclistas españoles sin ganar en una gran Vuelta. Soler acabó con esta mala racha.

La Vuelta llegó a Bilbao, que el año entrante será el sitio de salida del Tour francés. Fue un día caluroso y montañoso. Era la segunda jornada en el País Vasco. Era un recorrido de perfil quebrado, estilo «clásica». La mitad de los 187 kilómetros estaban pegados al mar. La otra mitad incluía 5 premios de montaña,  3 de tercera y 2 de segunda categoría. Resultó un día difícil y rápido, en el que la fuga se encargó de todo. Casi no se configura, porque la salida fue vertiginosa y el recorrido costero se hizo a 50 kilómetros por hora.

Después de muchos intentos, el consentimiento lo recibieron 18 aventureros. En el grupo iba Rudy Molard, el francés del FDJ, que solo necesitaba 58 segundos para convertirse en líder de la clasificación general. También estaba el británico Fred Wright, del Bahrain, que aspiraba a la camiseta blanca de mejor joven. ambos lo consiguieron. Otro que se trazó objetivo particular fue Victor Langellotti, que no tenía puntos en la montaña, pero sumó los suficientes para vestirse con la camiseta de lunares azules. Los demás, iban por la victoria de etapa, pero solo uno podía ser el bendecido.

Bilbao es una ciudad puerto. La cruza el Río Nervión, que desemboca en el Cantábrico. Sobre el río hay varios puentes, el más célebre es el de la Merced. Se construyó en 1886 y fue reconstruido en 1937. Su nombre lo heredó del convento de la Merced que estaba al lado izquierdo del río.  Desde el siglo XIX hay una leyenda que dice que al cruzar este puente hacia la orilla izquierda, en las noches, aparecen unos seres alados. Si estos seres tocan con sus alas a una persona que vaya sola, la llenarán de fortuna para el amor y para la vida. Hoy Soler cruzó este puente a un kilómetro de la meta, cuando los que lo escoltaban estaban a punto de alcanzarlo. No pudieron. Soler recibió la bendición.

El catalán del UAE acabó en Bilbao con una sequía de 669 días que tenían los españoles sin ganar en una gran Vuelta. Ion Izaguirre ganó la sexta etapa de la Vuelta del 2020, en plena pandemia y desde ese día no habían vuelto a hacerlo. Pasaron 121 etapas, casi 6 grandes vueltas, un año y diez meses. Soler estaba entró tarde al grupo de la fuga, tuvo que saltar del grupo principal para alcanzar a un grupo de aventureros que ya estaba armado, sufrió en la primera de las dos subidas al Alto del Vivero, un ascenso famoso en las afueras de Bilbao, se recuperó en el descenso y en el segundo paso del puerto se lanzó en solitario. Era su día. Se mantuvo con una diferencia escasa, pero suficiente. Celebró en la meta, con un grupo de escoltas a 4 segundos: Impey, Wright, Molard, Craddock, Arndt, Langellotti, Pronskiy, Mulberguer, Adriá y Masnada. Triunfo emocionante, apretado y dramático.

 El Jumbo, y concretamente Rogilc, como los dos años anteriores, cedió el liderato a un integrante de una fuga, después de un inicio de Vuelta brillante. La victoria de Soler y el liderato de Rudy Molard le dan un nuevo aire a la Vuelta, la revitalizan de cara a la primera llegada en una montaña de primera categoría.  Mañana la etapa sale de Bilbao, la ciudad que se transformó y encontró un nuevo aire con la construcción del Museo Guggenheim, que aprovecha La Vuelta para celebrar  sus 35 años. Serán 181 kilómetros hasta el inédito final con la ascensión al Pico Jano. Otro día para buscar un ala que traiga fortuna.

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