Ultrecht está en la historia de España. También en la de la Vuelta. En esta ciudad de canales, ríos, lagos, prados y villas históricas se firmaron en 1713 y 1715 los tratados que pusieron fin a la guerra de sucesión española. Hoy, en el arranque de la edición 77 de la ronda ibérica esta misma ciudad sirvió de escenario para que el Jumbo Visma le pusiera su rúbrica a la contrarreloj por equipos de 23,3 kilómetros que abrió la carrera.
Primoz Roglic se recuperó de sus fracturas en el Tour y tomó la partida hoy en los Países Bajos con el único objetivo de buscar nuevamente el título. Su cuarta corona consecutiva supondría un récord histórico en la Vuelta. El primer paso lo dio seguro y con autoridad. Su equipo, de licencia neerlandesa, hizo en casa un ejercicio impecable. Fueron al límite. Registraron el mejor tiempo de los 23 equipos cuando llegaron a la meta. Sus ocho pedalistas entraron juntos. Le ganaron por 13 segundos al Ineos y por 14 al Quick. A los demás equipos con aspirantes al título les sacaron entre 30 y 50 segundos. El Jumbo voló. Al legar a la línea, Roglic le hizo la venia a Robert Gesink, nacido en los países bajos, para que se vistiera en su tierra con la camiseta roja de primer líder.
La guerra de sucesión española comenzó tras la muerte en 1701 de Carlos II, «El hechizado», que no tenía descendencia. Fue el último representante de la casa de Habsburgo y dio paso a la instauración de la casa de Borbón. Otros tres gobernantes europeos, de Francia, Gran Bretaña y Países Bajos, casados con infantas españolas, alegaron derechos y se fueron a la guerra. En Ultrecht se reunieron por invitación de la Reina Ana y decidieron firmar la paz. Aunque posteriormente continuaron las hostilidades, este tratado cambió definitivamente el mapa político de Europa.
El recorrido de hoy fue rápido y técnico. A los primeros equipos les tocó correr con una lluvia leve. El primer equipo en hacer el ejercicio fue el Burgos. El primero en bajar de 26 minutos para los 23,3 kilómetros fue el Israel. El BikeExchange de Simon Yates fue el noveno en tomar la partida y llegó a la meta con un tiempo de 25’11». Faltado cuatro equipos, el Ineos de Richard Carapaz, fue el primero en bajar de 25 minutos, con 24’53». El último en salir fue el Jumbo Visma, que rodó a 55,159 kilómetros por hora y cruzó la línea dejando el cronómetro en 24’40».
La batalla por la clasificación general comenzó en las calles de Ultrecht. Roglic logró de entrada una renta en segundos. La Vuelta permanecerá en los Países Bajos dos días más. Si los vientos no aparecen para incidir en la carrera se esperan llegadas masivas y espectáculo de los esprinters. Mañana serán 175,1 kilómetros llanos de Hertogenbosch a Ultrecht. Será un recorrido hermoso por la región de Brabante Septentrional, donde se inspiró Van Gogh, cerca al mar. Roglic ya le dio la primera pincelada a su título como Primoz IV, pero sabe que hay muchos aspirantes a esa corona.