Dejando pelos en el alambrado. Pariendo. Porque Dios es muy grande. Se puede usar cualquier expresión popular, pero Argentina está en los octavos de final. Los astros se alinearon. Los suramericanos jugaron una terrible fase de grupos, pero sobrevivieron. Fueron segundos detrás de Croacia. Llegaron hasta el umbral del desastre y se devolvieron del abismo. No hay otra forma de explicarlo. Le ganaron 2-1 a Nigeria, con gol de Rojo, en el minuto 87. Messi llegó hoy al Mundial, apareció, hizo gol al minuto 14, estrelló un balón en el palo, se echó el equipo al hombro y sacudió la crisis de su selección. A Nigeria no le alcanzó con el empate de Moses por la vía del penal al minuto 51; le faltaron tres minutos, se quedó corta. Marcos Rojo apareció en el área y puso a Argentina en la llave con Francia. Así es el fútbol.
En el otro partido, Islandia quería hacer realidad un sueño; pero Croacia no tenía mayores afanes. Los de la península balcánica ya estaban clasificados y jugaron pensando en los octavos. Los nórdicos fueron fogosos, pero su fútbol solo les alcanzó para arañar la igualdad. Croacia pegó primero con Badelj, Sigurdsson empató de penal y al minuto 91 Perisic marcó el 2-1, despertó a los islandeses y los mandó para la casa.
En el otro grupo, Australia tenía que ganar para tener opción. Perú jugaba por el honor. Pudo más lo segundo. A los 20 minutos Carrillo revivió un grito de gol dormido hace 36 años en su país. El grito se repitió de cuenta de Paolo Guerrero, que justificó con un gol casi un año de luchas jurídicas para poder ser admitido en Rusia. Guerrero le dio decoro al cierre del mundial para su país, dejó a Australia por fuera y ahora se irá a pagar su sanción por doping.
En el otro encuentro de este grupo, cero fútbol. Dinamarca salió a buscar la clasificación y Francia a refrendar con un buen juego la suya. Lo primero se dio de carambola pues Dinamarca no ganó, pero su paso a octavos la aseguró el otro resultado. Francia no brilló, no tuvo fluidez en su juego y se vio opaca ante un rival más fuerte que los dos anteriores que enfrentó. Los dos equipos se conformaron con el cero que los clasificaba. El partido lo definió la silbatina por ratos de los asistentes al estadio. Se desesperaron. El primer partido sin goles en Rusia luego de 32 enfrentamientos.
Mañana a las 9:00 se resuelve el grupo F. Alemania juega ante Corea y México ante Suecia. Los cuatro equipos tienen opción matemática. La más lejana es la de los asiáticos que deberán ganarle a los campeones del mundo y esperar la caída de Suecia. En el juego de probabilidades podría darse un triple empate entre México, Alemania y Suecia que resolvería clasificados por la matemática de los goles. Grupo tenso como el de la tarde. A la 1:00 jugarán Brasil ante Serbia y Suiza ante Costa Rica. Los ticos no tienen opción y son la única de las 32 selecciones que no han marcado gol. Los otros tres equipos clasifican ganando, pero solo pasan dos.