Ciclismo con J

Publicado el Jhon Jaime Osorio

Giro 2022 – Etapa 12: Oldani desembarcó en el puerto de Génova

Génova fue durante varios siglos la puerta de entrada a Europa. En el Giro de Italia hoy fue sitio de llegada para los 164 ciclistas que continúan en carrera. El habitual puerto de inmigrantes, comerciantes,  viajeros y navegantes recibió en sus calles a un grupo de pedalistas aventureros que «navegó» en sus bicicletas desde Parma en el recorrido más largo de esta edición de la carrera italiana.  Después de 204 kilómetros con más de 2.500 metros de desnivel acumulado, el desembarco lo hicieron primero tres de los 25 integrantes de la fuga.

Stefano Oldani, que  nació en Milán hace 24 años, tuvo que viajar hasta Génova para conseguir su primera victoria como profesional. El muelle lo inspiró. Primero, para meterse en la fuga; después para salir a marcar al Lorenzo Rota, quien fue el primero en atacar dentro de la fuga; y al final, para esprintar sobre los dos rivales con los que llegó en punta. Ganó justo al frente del llamado «golfo de los poetas».  Este accidente geográfico genovés está en el Mar de Liguria.  Allí llegaron de visita, en misión académica, de huida, para inspirarse o simplemente de turismo, en diferentes momentos de la historia, entre otros, Marguerite Duras, Cortázar, Lord Byron, Dante, Ernesto Sábato, Juan Rulfo, Mary Shelley, Lawrence, Gabriele D’Annunzio y Cesare Pavese.
La jornada fue larga como una novela, pero de desarrollo rápida como un cuento.  El trío que llegó en punta, integrado por Oldani, Rota y Leemreize, registró una velocidad promedio de 46 kilómetros por hora, en una ruta que incluyó tres premios de montaña. De salida, el ritmo fue  muy alto. La fuga solo se pudo conformar después de 70 kilómetros. En ella lograron cupo 25 pedalistas de 18 equipos, que escribieron la historia del día, resolviendo todo hasta la meta. En el penúltimo premio de montaña Lorenzo Rota lanzó un ataque solitario, que encontró respuesta en el descenso de solo dos pedalistas más. Cuando Kelderman, Mollema, Hamilton y el colombiano Buitrago quisieron reaccionar, ya la crónica estaba lista. Se esforzaron, pero no pudieron alcanzar.
La Génova literaria, la que recorre Cortázar en su novela Los premios, la que describe  Alejo Carpentier en El arpa y la sombra, la que llena de nostalgia a Ribeyro y lo hace regresar a Lima como lo cuenta en su diario, le dio paso hoy a otro tipo de relato, el del esfuerzo incansable de un ciclista milanés en busca de la gloria metido en una fuga numerosa con pedalistas de mucho renombre, empezando por su compañero de equipo Mathieu Van Der Poel. Hoy Oldani ganó al esprint y escribió el capítulo más importante de su historia deportiva.

El Giro llegó hoy a buen puerto.  El grupo principal entró a 9 minutos del ganador, sin mayores novedades en la clasificación general a excepción del ascenso al puesto 13 de Wilko Kelderman. El puerto de Génova no será sitio de salida mañana, pues la etapa 13 sale de Sanremo, ciudad de flores y música en el corazón de la Riviera de Liguria, y viaja hasta Cuneo, una ciudad meseta en la puerta de entrada a Los Alpes. Serán 153 kilómetros en una jornada con una sola subida, el Colle di Nava, en la parte inicial. Día de mucho cuidado. Otro día propicio para embarcarse en la fuga.

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