#LloronasDeAmoryDesamor
Por: Milena Agudelo Trejos
Es difícil entender cómo funciona el amor. Y cuando llegaste a mi vida intempestivamente, bastaron solo unos segundos y unas miradas para entender que tu presencia tenía un propósito, que nuestro encuentro no fue un azar del destino y que los dos estábamos dejando atrás amores que nos hicieron perderlo todo, pero no las ganas de amar.
Desde mi experiencia, creía que amar era lo que había conocido durante más de 13 años. Sí, esa separación traumática me hizo pensar que eso del amor ya no era para mí. Pero cuando logré estabilizarme y aceptar, me trajiste el instante de dejarse llevar por el corazón, de ignorar la sensatez y de que esa y otras palabras retomaran su verdadero sentido.
No exagero al verte como un ángel. Estar a tu lado me ha permitido entender que el amor no se condiciona, pues él juega contigo y con todos tus pensamientos, hasta el punto de llevarte a cometer eso que decías no hacer.
Tú le has devuelto a mi corazón las ganas de amar sin condiciones, sin restricciones y sin expectativas. Hoy veo la vida con simplicidad, sintiendo, sin calcular tanto cada proceso que vivo día a día.
Mi bolsillo puede estar vacío, pero tus miradas llenas de amor y dispuestas a dar la batalla conmigo, me hacen recobrar la fe y sentir que tengo un tesoro, un ángel.
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