Por: Francy Elena Valencia Castañeda
Defiende tu derecho legítimo a ser feliz, a revaluar promesas que hiciste en el pasado, a tomar distancia de personas que ya no suman en tu vida.
Defiende tu derecho a decir: «Lo siento, antes quería, pero ahora no, lo he pensado mejor».
Ampara tu cambio de opinión: «Sí. Elegí esa carrera años atrás, pero he descubierto que amo hacer otra cosa».
A manifestar: «Gracias por tanto, pero ya no va más, es suficiente para mí».
Defiende tu derecho a priorizarte: «Prometí estar siempre a tu lado, al costo que fuera, pero hoy me amo más que en aquel entonces que te lo prometí».
Nada tiene que ser para siempre.
Puedes rediseñar tu vida y tu carrera tantas veces como sea necesario.
Elegir con quien pasar el tiempo, cambiar de proyecto o de trabajo, probar una nueva ciudad para vivir.
Puedes elegir amar de nuevo. Abandonar la necesidad de satisfacer a todo el mundo menos a ti. Puedes elegir hacer eso que sólo tu corazón sabe que hay que hacer, aún con miedo y con las voces externas que dicen que no lo hagas.
¡Elige por ti y apuesta grande por ti!.
La vida es tan corta, y aún así, se nos va el tiempo decidiendo. Tenemos tanto miedo a fallar que se nos olvida que no somos eternos.
Vivimos como si no fuéramos a morir, aún sabiendo que somos tremendamente vulnerables. Entre tanto, la vida sólo nos susurra al oído: «Vamos, hazlo, no importa, nada es para siempre».
En 2018 elige ser feliz, vivir al máximo, pero sobre todo, elige lo que te dé PAZ.
Más de Lloronas de Abril en https://www.facebook.com/lloronasdeabril/