La confianza empresarial es un intangible que merece ser contado y valorado. Es un activo que dinamiza la economía, que impulsa el desarrollo social y que fortalece la reputación de un territorio. En un contexto donde el 59 % de los colombianos tiene una opinión favorable de sus empresarios —según la última encuesta que hace poco compartió el equipo de Invamer— es imperativo reflexionar sobre este rol clave que desempeña el sector empresarial y, especialmente, aquellas organizaciones que eligen establecerse en el país. 

Y también nos lo mostró el Barómetro de Confianza de Edelman 2025 para Colombia, en el que las empresas son consideradas como la institución más confiable (63 %).  Según este reporte, en nuestro país las compañías no solo son vistas como competentes, sino también como las organizaciones más éticas, con un incremento de 19 puntos en la percepción de ética empresarial desde el 2020. A esto se suma que el 72% de las personas confía más en su CEO empleador, convencidos de que toma decisiones acertadas.  

Estos datos confirman que, sin duda alguna, el empresariado colombiano es mucho más que cifras y estados de resultado. Las empresas son la columna vertebral del desarrollo de un país: invierten en el capital social, generan empleo formal, fomentan la innovación y el bienestar, y sustentan la economía.

En el Valle del Cauca, por ejemplo, esta dinámica se refuerza aún más al ver el crecimiento exponencial que han tenido las multinacionales de capital extranjero, pasando de 80 en el 2010 a más de 240 en la actualidad, un logro derivado del trabajo articulado entre instituciones como Invest Pacific, que trabaja en sinergia con la Gobernación del Valle, las alcaldías, las cámaras de comercio, la ANDI, las universidades y el ecosistema institucional y gremial en su conjunto, para promover el entorno de negocios y de confianza para la inversión.  

De hecho, la huella multinacional del Valle del Cauca tiene más de 90 años y ha incidido directamente en su desarrollo, dotación de servicios y diversificación de su tejido empresarial. Según datos de Invest Pacific, las empresas de capital extranjero en el Valle del Cauca aportan cerca del 37 % de las exportaciones de la región, 21 % de su PIB y más del 5 % del empleo formal. Además, la inversión extranjera ha llegado a 26 municipios del Valle, mostrando ese abanico de oportunidades que ofrece el departamento.  

Este avance en materia de confianza empresarial es esencial para mantener el optimismo, fortalecer la competitividad y consolidar un desarrollo más sostenible. Y, para preservar esta confianza, se necesita impulsar los liderazgos y hacer aún más visible el aporte del sector productivo a las discusiones que mueven la sociedad. Las empresas deben motivarse a contar más sus historias y a sumar su voz como protagonistas de ese bienestar y progreso. 

Sin duda alguna, el tejido empresarial diverso y sólido que tiene el Valle del Cauca, es un factor de competitividad ya reconocido que refuerza esa generación de confianza. Nuestro compromiso es claro: mantener ese cuidado a las empresas, ayudando a comunicar su valor. Solo así aseguramos que las profundas transformaciones del país sigan teniendo voz empresarial.

*Por: Andrea del Pilar Barrero, directora de Comunicaciones y Mercadeo en Invest Pacific. 

Crédito foto: Zona Franca del Pacífico.

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