En opinión de Libardo Riascos, rector de la IE Ineterpo, “la precariedad de las infraestructuras de todas las instituciones educativas con sus respectivas sedes, con pocas dotaciones, con falta de personal docente y administrativo” amerita tal medida. Columna.
Por Libardo Riascos Perlaza, rector de la Institución Educativa Técnica Comercial Teófilo Roberto Potes, Ineterpo.
Hoy Buenaventura vive una situación crítica y lamentable en el ofrecimiento de la educación para la niñez, la juventud y de los adultos.
Ante esta situación la principal mejora o cambio que necesita la educación en Buenaventura es la voluntad política de nuestros dirigentes, sentido de pertenencia, resiliencia y mucho amor.
Seguido a esta premisa se sabe que los pueblos requieren educación con calidad. Y esto ocurre cuando esa educación atiende las necesidades particulares de cada pueblo: formación ética y moral para el trabajo y la convivencia pacífica, conocimientos científicos y tecnológicos, atención a las necesidades básicas de las personas.
Para lograrlo el Estado debe planear e invertir en el sector educativo los recursos suficientes y los miembros de la comunidad educativa (directivos, docentes, personal administrativo y padres) aportar calidad al acto pedagógico.
La sociedad hoy en día se queja de que el incremento de la cobertura educativa no ha marchado a la par con el mejoramiento de la calidad.
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La educación en Buenaventura requiere inicialmente una administración distrital comprometida con los cambios promisorios, que lleven al desarrollo y/o cambio sustancial, que direccione el arranque tanto social, industrial como patrimonial del Distrito.
Seguidamente hacer tomar conciencia a los educadores de que solo con el conocimiento impartido a los educandos, con responsabilidad y entereza, se puede influir en ellos, para que den su potencial y sus capacidades con el cual hacia el futuro ganaría el Distrito.
Y tercero, adjunto al interés de la entereza y compromiso de la dirección del Distrito, se requiere una reactivación industrial, que motive a los jóvenes a emprender estudios, a sabiendas que sí hay tanto trabajo para desempeñar, como condiciones para crear empresas, derivadas del conocimiento que se adquiera en los campus educativos de calidad.
Para este fin el Concejo Distrital deberá estar a la altura y comprometido para propiciar las condiciones de industrialización del Distrito, para motivar a los jóvenes en sus deseos de su crecimiento intelectual y personal.
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Una de las principales mejoras o cambios que se requiere urgentemente en la educación de nuestro Distrito es la educación con sentido, con pertinencia y enfoque diferencial, de manera que sus docentes estén cualificados y las instalaciones de las infraestructuras educativas acondicionadas integralmente tanto en su zona urbana como en su zona rural. Por ello es importante realizar una intervención a la educación de nuestro Distrito.
También para que haya una mejora o un cambio debe haber verdaderos líderes comprometidos con la educación de nuestro Distrito y nuestro territorio porque a partir de ese comprometerse, de esa dedicación, de esa disposición, que parte del señor alcalde, del señor secretario de educación, de los rectores, de los maestros, de allí es que surge ese plan para revisar en que se está fallando.
Y a partir de allí van a surgir ideas entre todos para que se de eso tan anhelado, sí, esto sería la parte principal de ese cambio, sí, que de verdad hayan verdaderos líderes, comprometidos, dedicados, enamorados, motivados por el cambio de nuestra educación en Buenaventura.
Realizar transformaciones profundas en la parte administrativa de la secretaría de educación, en la oficina de inspección y vigilancia, en el macroproceso de calidad educativa; en los jefes de núcleo y supervisores; en los rectores y coordinadores.
Además se requieren docentes bien formados, estudiantes con deseos de aprender y familias acompañando a sus hijos en el proceso educativo.
Fortalecer el diseño de los planes de estudio y del currículo pertinente al contexto social que parta de una educación propia con tendencia a una educación universal, donde se haga un esfuerzo de brindar a los educandos, tan siquiera un contenido del currículo nacional por grados y niveles en un 80 o 90 por ciento, que le permita desarrollar a los educandos sus competencias idóneas al llegar a la educación superior.
La zona rural de Buenaventura debe ser atendida en un marco diferencial, por la situación compleja de sus poblaciones marítimas, fluviales y carreteables, totalmente diferentes a la lógica del casco urbano.
En consenso de los 42 rectores de las instituciones educativas oficiales de Buenaventura que vienen atendiendo un lastre de precariedad en las infraestructuras educativas de todas sus instituciones con sus respectivas sedes, con pocas dotaciones, con falta de personal docente, administrativo, se está solicitando clamorosamente al señor alcalde Distrital de Buenaventura la declaración de la emergencia educativa para lograr el cambio que realmente necesita la educación de Buenaventura en todos sus aspectos.
*Trazador misional de esta publicación de Fundación Color de Colombia: Línea estratégica 2: Educación de calidad y equidad. Iniciativa: Apoyo a formación de talentos. Proyectos: Semilleros de Becarios U. y apoyo a Buenaventura piensa en grande 2040, 500 años de la ciudad.
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La Fundación Color de Colombia fue creada en 2006. Nuestra misión es promover el reconocimiento, la movilidad social y la integración de la población afrocolombiana en la sociedad y el desarrollo sostenible.
Tenemos tres líneas de trabajo estratégicas: 1) Reconocimiento, cultura e integración; 2) Educación de calidad y equidad; y 3) Empoderamiento económico, mercados inclusivos y desarrollo sostenible.
Ayudamos a cuidar un legado de más de 200 años, que viene desde antes de los protagonistas negros y mulatos (“de color”, como se decía oficialmente en la época) de la guerra de independencia de Colombia y recorre dos siglos largos contribuyendo a construir este país.
Nos sentimos herederos de la experiencia de los colombianos negros en la modernidad nacional.
Cuando la colombianidad se gestó, los descendientes de africanos ya estaban aquí y ayudaron a crear la nueva nación, que se convirtió en nuestra patria, a la que amamos tanto, así no hayamos recibido el trato debido.