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In memoriam del Mayor Fulton (1928-2021), chocoano de la Policía

En 1955, Rogerio Fulton Velásquez desafío «una convocatoria que no era para negros», según le dijeron en Quibdó cuando fue a averiguar  por las admisiones en la Escuela de Cadetes General Santander. Se quejó con el presidente Rojas Pinilla  y este ordenó darle una beca. Semblanza por Américo  Murillo.

Por: periódico El Manduco.

Mayor Rogerio Fulton Velásquez

Con profundo pesar hemos conocido al medio día de este viernes 25 de junio de 2021 la noticia de la muerte del Mayor Rogerio Fulton Velázquez, un personaje importante en la historia del Chocó por haber participado en importantes acontecimientos en su condición de oficial de la Policía Nacional y en su vida como civil, maestro, militante del partido conservador.

El Mayor Fulton, como era conocido, hacia parte también del engranaje social y cultural de la calle de Las Águilas y el barrio la Yesquita de Quibdó.

Un hombre animoso, social, dado a su familia y las buenas costumbres. Recientemente había fallecido su señora esposa compañera de viaje de muchos años. Deja una numerosa familia y descendencia a quienes expresamos nuestras condolencias.

Sobre el hombre, el personaje, el militar, Américo Murillo  hizo esta semblanza en una entrega de sus memorias.

«El segundo chocoano en ingresar a la Escuela de Cadetes fue Rogerio Fulton Velásquez en 1956, nacido en Condoto, quien se graduó inicialmente como maestro superior en la Escuela Normal de Varones en Quibdó, pero no ejerció la docencia; porque inmediatamente lo nombraron en Quibdó, en una oficina denominada Superintendencia de Rentas, como subalterno del señor Elín López Paz, padre del Dr. Jorge Elín López Valencia.

En esa época en el diario El Tiempo salió publicado un aviso en el que se anunciaba la convocatoria para ingresar en la General Santander, lo que le llamó fuertemente la atención a Rogerio Fulton, quien de inmediato se acercó al cuartel de la Policía para requerir mayor información.

En la guardia se encontraba un pastuso, que al enterarse del objeto de su visita lo despacho olímpicamente manifestándole que esa convocatoria no era para negros.

Rogerio Fulton, ni corto ni perezoso le escribió una carta al Presidente de Colombia, el General Gustavo Rojas Pinilla, en la que le ponía en conocimiento lo que le había ocurrido en la guardia de la Policía en Quibdó, pero además le expresó que él quería ser el primer oficial conservador chocoano de esa institución.

Días después, estando Rogerio Fulton en la oficina, recibió un marconigrama y al leer su contenido, oh sorpresa, le informaban que por orden del Presidente de la República, tenía cupo y beca para ingresar a la Escuela de Cadetes General Santander.

Con la noticia Rogerio Fulton no aguantó la emoción, gritaba y saltaba de felicidad, al punto que los compañeros de oficina pensaron que se había “desmentizado”, como se decía en el pasado, a quien tenía la salud mental comprometida.

Su condición de educador le permitió adaptarse a la disciplina y dar ejemplo; como también a exponer con claridad las enseñanzas que le impartían en su formación como cadete, lo que le significó ganarse el primer puesto de su curso para la graduación como SubTeniente.

En el grado de Teniente fue alcalde militar en Tadó y en Istmina; como Capitán se desempeñó como Sub Comandante en Quibdó y en el grado de Mayor fue Comandante en Quibdó y en la Guajira, encargado desde la Dirección General de la Policía.

Retirado del servicio activo, fue Auditor General de la Fábrica de Licores del Chocó, Secretario de despacho en dos oportunidades en la Alcaldía de Quibdó, alcalde encargado en Quibdó, secretario administrativo de la Gobernación, diputado a la Asamblea en dos oportunidades y director del Das, en el Chocó».

*Trazador misional de esta publicación de Fundación Color de Colombia: Línea estratégica 1: Reconocimiento e integración. Iniciativa: Memoria histórica y social. Proyecto: Memorias sociales.  

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