En estos 6 años que llevo escribiendo en estas páginas de El Espectador cada domingo, siempre he hablado de la vida y de la muerte, sobre todo de la muerte, pero la muerte natural, la muerte cuando el Dios todopoderoso, el universo, el destino, la fecha de caducidad que le corresponda a cada uno le llegue, pero nunca he hablado de cómo es capaz alguien de quitarle la vida a otro.
Lo que pasó esta semana en el país con los policías, cómo entre varios manifestantes en Caquetá, se unieron para acabar con la vida de otro, con la esperanza, con sus sueños, con sus anhelos, no sólo de una persona sino la de su familia. Y cómo es posible que horrorizados viendo cómo sucede esto y que no pase nada y que todos sigamos normal, como si nada hubiera pasado, cuando un ser es desgarrado. ¿Dónde queda la humanidad de los demás?. ¿Dónde queda nuestra humanidad?
Considero inhumano que el presidente de la república de Colombia justifique esas acciones, esos hechos, que su ministro del interior sea tan cínico de decir que eso fue un “cerco humanitario” … ¿HUMANITARIO? ¿Qué le parece humanitario secuestrar a unos policías y matar a uno y herir a otro?
Ese policía que secuestraron y posteriormente asesinaron, se llamaba Ricardo Arley Monroy Prieto, tenía 39 años, estaba casado y tenía dos hijos, uno de apenas 2 meses de nacido.
Yo le pregunto al presidente Gustavo Petro y al ministro del Interior, Alfonso Prada, si ese policía fuera su hijo, su hermano, su papá, estarían diciendo lo mismo, con la misma frialdad, que fue un “cerco humanitario”? ¿Dirían lo mismo con la misma indolencia? Es muy fácil cuando la vida no nos toca a nosotros, a nuestros seres queridos. Como lo dijo el ministro de defensa Iván Velázquez, que si matan un policía pues, son cosas que pasan en el proceso. ¿Les parece normal?. Estamos en manos de un gobierno que para campaña, para ganar votos, habla de vida, pero en el ejercicio cuando llega al poder, justifica la muerte. Estamos en manos de un gobierno INHUMANO.
Me uno a las condolencias y al dolor de la Familia Monroy Prieto que hoy sufren por el vil asesinato de su hijo, hermano, esposo y padre.
Disculpen, amables lectores de cada domingo, pero hoy no puedo escribir de cosas bonitas, ni de historias amables, no me nace.
NOTA: No hagas a los demás lo que no quieres que te hagan a ti, ni a tus hijos e HIJAS. Aplica para todo en la vida.
En Twitter: @AndreaVillate
En Facebook / AndreaVillate Periodista
En Instagram /andreavillate_cielos
Mi libro Relaciona2 lo consigues en Amazon y te llega a la puerta de tu casa. Consíguelo aquí
ANDREA VILLATE
Escribe acerca de la vida, la muerte y la salud tanto física como emocional. Todos los domingos. –
Email:
[email protected] – Twitter: @AndreaVillate –
Facebook: andreavillateperiodista