El feminismo es nuestro estandarte como apuesta política
Toda mujer sin importar la clase social, cultura, educación, etnia o cualquier condición humana, desde antes de nacer está destinada a vivir en desigualdad, porque el sistema lo impuso de esta manera, aún cuando han pasado décadas de lucha para encontrar el camino correcto de la emancipación auténtica femenina y muchas cosas han mejorado gracias a ello, no ha sido suficiente.
El feminismo posmodernista no puede estar arraigado a la realidad histórica de nuestras antepasadas, porque los tiempos cambian y las conquistas logradas nos ayudan a avanzar, pero tampoco puede escupir sobre esa realidad, debemos entender de dónde venimos, y si bien nacemos mucho más libres a diferencia de nuestras antepasadas, seguimos naciendo en desigualdad social, política y cultural, por el simple hecho de ser mujeres.
Los feminicidios siguen en aumento y lo más triste y grave, es que el suicidio femenino también asciende considerablemente, casi pudiéndose equiparar con el feminicidio.
¿por qué está sucediendo esto?
Es una pregunta que debemos hacernos todas y cada una de nosotras. La respuesta es simple, porque las estructuras de poder son superiores a nuestra voluntad, muchas veces porque entre nosotras mismas no hemos encontrado la manera de ser empáticas las unas con las otras, sin importar las diferencias ideológicas, políticas y culturales. Nos cansamos de vivir, entramos en depresión.
Y si, ellos también entran, también sufren por un sistema injusto. Pero a diferencia de ellos, por alguna razón, nosotras nos sentimos mucho más agotadas.
Desarrollo la idea, si bien es cierto que las cifras de suicidios en los hombres superan en cantidad a los de las mujeres, esto es resultado directo del machismo, porque uno de los encargos del patriarcado sobre el hombre es ser fuerte, no mosatrar nunca debilidad, ser un guerrero y es por eso que no buscan ayuda. Que las cifras de suicidio femenino esten aumentando, solamente demuestra que estamos cansadas de luchar contra la corriente.
Desde el feminismo Artesanal que inicie tejiendo a pulso, desde la individualidad y desde la intimidad, hace mas de una década y se empezó a convertirse en un tejido grupal de diversas mujeres, que la mayoría no nos hemos visto a los ojos pero compartimos periódicamente a través de las redes y ocasionalmente tenemos encuentros presenciales y aunque no somos íntimas sabemos que formamos parte de un ejército de resistencia y que sin conocernos hermanamos y lo hacemos porque entendemos que nuestro único objetivo es vivir como mujeres putamente libres y que nos conviene unirnos desde la diferencia.
Este 8 de marzo le gritaremos al patriarcado una y mil veces qué las mujeres actuales no estamos dispuestas a retroceder, que no seremos las perras sumisas adiestradas del sistema, aceptamos el reto de luchar día tras día, asumimos que vivimos libres o morimos en el intento, eso haremos este 8 de marzo, tengo nostalgia, melancolía, ira y emociones encontradas, no voy a salir a marchar, no por falta de voluntad, ni tampoco voy a decir que es por falta de fuerzas, aunque la he perdido varias veces y sin embargo nunca he dejado de salir, no lo voy a hacer porque los tiempos no me están dando, porque tomé la decisión de empezar hacer un feminismo de adentro hacia fuera, mi vida es un estandarte para quienes me siguen, porque no tengo un discurso, soy mi discurso y es mi manera de motivarlas a vivir más allá de todo pronóstico, como mujeres emancipadas Y emancipadoras.
Este 8 de marzo, sólo puedo decirles que resistan desde su realidad y que su mayor protesta es hacer de su vida un estandarte, para que las nuevas mujeres vean que sí podemos podemos vivir en igualdad de condiciones y derechos referente a los hombres, podemos ser mujeres libres aunque el sistema quiera llevarnos al pasado, decidimos sobre nuestras vidas y no le pedimos permiso ni al Estado, ni la iglesia, ni a la sociedad.
Mar Candela ideóloga Feminismo Artesanal – Pormujeres putamente libres