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Publicado el Paula Castillo Lenis

Coronavirus: Toda la ayuda para los humanos… ¿Y los animales qué?

Coronavirus: Toda la ayuda para los humanos... ¿Y los animales qué?
Los animales que han sido abandonados o que hacen parte de miles de fundaciones en Colombia y el mundo necesitan ayuda durante este confinamiento.

La prioridad es prevenir el contagio, aplanar la curva, recaudar recursos y mercados para la gente menos favorecida que no la está pasando bien en esta cuarentena por cuenta del Covid-19. Y la verdad, es que eso está perfecto. Es clave el aislamiento para frenar este virus poderoso que puso de rodillas a la humanidad. Pero, ¿Y los animales qué? Esos seres que han sido abandonados o que hacen parte de miles de fundaciones en Colombia y el mundo necesitan ayuda URGENTE durante este confinamiento.

Cuando se habla de animales desprotegidos la mayoría de personas siempre piensa en perros y gatos, pero resulta que los caninos y felinos no son los únicos animales que dependen de los seres humanos. Hay muchos seres vivos que también necesitan de los humanos como los caballos, vacas, burros, toros, cerdos, gallinas, patos, ganzos, y hasta esas llamas que fueron rescatadas de las calles, en donde su trabajo era posar para la foto.

Todos estamos enfocados en aislarlos en nuestras casas y no nos está importando lo que queda afuera. Y algunos que se dicen llamar animalistas, poco o nada les está importando el tema, porque como no pueden salir de sus casas les ha quedado difícil tomarse una foto ayudando a un animal para inmediatamente subir a Instagram, para que se les infle la popularidad en redes sociales donde son catalogados como «amantes de los animales«.

¡Se tenía que decir y se dijo! Un gran número de personas que se hace llamar voluntario o donante hace esta gestión para que la sociedad lo califique como un ser altruista, pero esto solo responde a intereses personales, buscando prestigio social, influencia, o sencillamente porque está de moda amar a los animales, volverse vegano y criticar a todo aquel que sigue comiendo carne y tomando leche.

Un gran porcentaje de la humanidad piensa en los animales como un sabor, cuando se va al supermercado y es presentado como un mero corte o una presa empaquetada y refrigerada. Y también un gran porcentaje de la humanidad piensa que el maltrato animal son solo golpes, y no hay nada más alejado de la realidad que esto, pues maltrato animal es tenerlos mal, que no cuenten con una buena alimentación y que estén mal de salud. Eso también es maltrato animal. El maltrato no solo se ve representado únicamente en esos videos que se vuelven virales en redes y que todos compartimos y repudiamos para sentirnos «animalistas«.

Esos animales que fueron adiestrados y se les dio una dependencia de supervivencia gracias al cuidado de nosotros,  piden a gritos ayuda durante en esta cuarentena. Están indefensos, porque como han estado a diestras de lo que hagan sus cuidadores, sus amos, sus dueños, y ellos están aislados, pues sencillamente están desprotegidos porque muchas personas han preferido abandonarlos. Y la gente que por el contrario ha seguido brindándole protección y bienestar a cientos de animales, a través de fundaciones, también necesitan que le echemos una mano para que puedan seguir con esta gran labor.

El aislamiento de los animales no fue preventivo, fue forzado. Y la gente desconoce que esos seres domesticados no son portadores del virus, y no lo digo yo, lo dicen cientos de estudios científicos mundiales que se han realizado alrededor del tema.

Hay caballos, vacas, burros, toros, gallinas, patos, perros, gatos que han sido abandonados en diferentes partes del mundo porque las personas están pensando en su bienestar. Los animales también necesitan un lugar digno, una salud estable y una alimentación básica.

Las donaciones, los aportes y el voluntariado que hacen empresas y personas a esas fundaciones y santuarios donde se protegen sin reparo no solo a perros y gatos sino a animales de gran tamaño, se ha visto afectado por el Coronavirus, pues no solo no es fácil el desplazamiento de los voluntarios, también a muchas empresas que hacen aportes les ha tocado recoger su economía por la delicada situación financiera por la que atraviesa el mundo y las personas que querían vincularse pues no se encuentran en una situación económica estable.

Admiro profundamente a esas fundaciones que acogen a los animales abandonados y les brindan lugares dignos para vivir, alimentación específica según su dieta y adecúan grandes espacios en sus fincas para tenerlos como se merecen. Y los admiro aún más porque uno nunca los ve por redes sociales y por los medios de comunicación ufanándose de su labor, porque simplemente su esencia es amar a los animales y les vale cinco el reconocimiento mediático. Su labor es silenciosa. Los recursos para mantener su gestión en pro de los animales sale de sus bolsillos y de porcentajes de ganancias de empresas propias.

Fundaciones como Fupaal, que ya lleva 11 años en marcha, y que opera como un centro de rescate de animales que han sido vulnerados de sus derechos, explotados y maltratados, tiene 87 animales a su cuidado entre bovinos, equinos, llamas, cerdos, burros, gallinas, patos, ganzos, perros y gatos. Los cuales todos tienen una alimentación diferente. Una dieta entre pasto, concentrado y vitaminas que se requieren según su cuadro clínico.

Fupaal, después de estar 11 años en el completo anonimato cuidando y protegiendo a los animales, alza su voz para pedir apoyo. No solo para su fundación sino para todas las fundaciones del país y del mundo que protegen a los animales. Porque esos santuarios de animales no son un albergue, ni un jardín de paso, son el hábitat para seres vivos que en algún momento estuvieron en las calles sirviendo de mulas para recicladores, por ejemplo. Ellos jamás le han pedido donaciones a nadie, pero ahora necesitan que les lancen un salvavidas porque las condiciones mundiales están difíciles no solo para los humanos, para los animales también.

Muchas personas apoyan a los animales pequeños, pero a los grandes no. ¿Y ustedes sabían que el el animal más maltratado es el caballo? A los equinos los utilizan para cientos de labores pesadas. Pero casi siempre los vemos de exposición: impecables y elegantes. Pero resulta que detrás de esa exposición algunos caballistas los azotan y los alquilan para sacarles plata, y funcionan como las gallinitas de los huevos de oro.

Si está en nuestras manos, a nuestro alcance, dentro de nuestras posibilidades, ayudemos. Ayudémonos todos, incluyamos a los animales.

Nuestra raíz como seres humanos es brindar amor, sin recibir nada a cambio, y a veces se nos olvida.

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