
Quien alguna vez dijo que soñar no cuesta nada, definitivamente no ha luchado por metas. Soñar cuesta, pero es posible, para la muestra el diseñador Colombo-francés Haider Ackermann ha sido el invitado de honor de este año en Colombiamoda.
Hasta hace poco más de un año comenzó a sonar el nombre del aclamado diseñador entre los organizadores de la feria que se realiza anualmente en Medellín desde hace un cuarto de siglo. Una aventura, casi una travesía, sería lograr que este celebrado diseñador que nunca ha hecho un desfile fuera de París, decidiera reencontrarse con sus raíces.
La celebración del aniversario número 25 de Inexmoda (Instituto para la Exportación y la Moda) y la perseverancia y esfuerzo del presidente ejecutivo de Inexmoda, Carlos Eduardo Botero Hoyos; La Gerente General de Marca País Colombia, Claudia Hoyos, y la experta en moda Pilar Castaño por cumplir este sueño casi inalcanzable, encontraron una aliada en París que ayudaría a materializarlo.
En mayo del 2012 sucedió lo inesperado. Gracias a Victoria Fernandez, una colombiana radicada en la ciudad de las luces, y una de las musas de Ackermann, quien fue la intermediaria para conseguir que el aclamado príncipe de la moda volviera a la tierra que la vio nacer, y que abandonó a los nueve meses de nacido.
En junio del 2012 el enigmático modisto arribó al País. Ya en Bogotá y luego de la designación honoraria que recibió por parte del presidente Juan Manuel Santos, Ackermann asistió a una conferencia en la Universidad Jorge Tadeo Lozano de Bogotá, dirigida a los diseñadores, estudiantes de diseño y periodistas interesados en su trabajo y trayectoria. El conversatorio fue trascendental para que el diseñador tomara la decisión de regresar y mostrar un poco del lujo y osadía que encierran sus colecciones.
“Es la primera vez que presento mis colecciones en un escenario diferente a París. El año pasado cuando estuve en Colombia me hicieron un regalo, no fue un regalo material, sino queme permitieron encontrarme con muchos estudiantes de diseño, quienes me llenaron de miles de preguntas, y dije, la mejor respuesta que puedo darle a estos jóvenes es presentar mi colección en su País. Por eso decidí aceptar la invitación de Carlos Eduardo Botero, para poder darle respuesta a todos esos colombianos soñadores que quieren hacer moda. Mostrarles cómo se hace la moda.” Afirmó el diseñador en una entrevista el pasado viernes en la W.
Una divina excentricidad y un carácter andrógino abrazan las creaciones del diseñador. Su obsesión por las capas y los juegos de volúmenes, el drapeado, la yuxtaposición de telas y cortes asimétricos serán el deleite de los asistentes a esta nueva edición de la feria de moda más importante de nuestro país.
35 guerreras, como se les llama a las modelos de Ackermann, recorrerán la pasarela destinada en el edificio EPM en Medellín, haciendo a los asistentes recorrer el mundo en pocos minutos. Los incansables viajes alrededor del globo, el misterio y los guiños melancólicos que hacen parte del ADN del couturier (modisto) se verán reflejados en cada una de las piezas, de las cuales seguramente los pantalones se reinventarán una y otra vez.