Cristina de Pizán y su hijo
La escritora Cristina de Pizán fue una mujer asombrosa, un ser vital, una humanista, escritora y feminista adelantada centurias a su época. Nació en Venecia en 1364, así que su vida trascurrió en pleno Medioevo, una época en la que las mujeres valían muy poco en la sociedad. ¡Cómo sería el dominio sobre las mujeres en aquella época! Es inimaginable.
Cristina de Pizán es autora del primer libro feminista que se haya escrito: Le Livre de la Cité des Dames, o La ciudad de las damas, publicado en 1405, en el que abordó temas como la violación, la igualdad o el acceso de las mujeres al conocimiento. Esta mujer se dedicó a escribir porque quedó viuda a los veinticinco años. Se había casado a los dieciséis, y ahora había quedado a cargo de tres hijos, de su madre y de una sobrina, pues lo que su marido le dejó no le alcanzaba.
Pudo volverse escritora como medio de vida porque recibió educación, e incluso hablaba tres idiomas: francés, italiano y latín. Escribió varios libros y tuvo mucho éxito. De Pizán se movía entre la nobleza, y sus publicaciones tuvieron el apoyo de los duques de Borgoña y del rey Carlos VI y su esposa, Isabela de Baviera.
Cristina de Pizán le presenta su libro a Isabel de Baviera
Cristina de Pizán escribió no solo biografías (como la de Carlos V de Francia), canciones, cuentos y poemas; también creó una organización para pensar y debatir sobre los derechos de las mujeres, que se llamó La Querelle de la Rose. Esta agrupación perduró cuatro siglos, del siglo catorce al diecisiete.
Ilustración del libro La ciudad de las damas
Hay una película de 2009 basada en su historia, Chistine Cristina, dirigida por Stefania Sandrelli.
Ahora demos un salto de seis siglos y aterricemos en el siglo veinte, para ver qué ocurría hace cien años con la escritura de las mujeres. En su libro Una habitación propia, publicado en 1929, Virginia Woolf sostenía que una mujer sin dinero y sin una habitación propia no podía crear. En su entorno inglés, más civilizado que el de otros lugares de Europa, en ese entonces se discutían asuntos como el de si las mujeres podían ser tomadas en serio como entes capaces de pensar y escribir, y si deberían tener el derecho a montar en bicicleta.
En su libro, Woolf observa que las mujeres no podían escribir por culpa de su dependencia económica. Creo que esta es una verdad para todos por igual: sin libertad financiera no hay libertad, y la pobreza es lo que da pie al sometimiento y la esclavitud. Eso de tener una habitación propia era algo impensable a principios del siglo diecinueve, solo las hijas de padres nobles y adinerados podían contar con ese lujo. Pensándolo bien, todavía hoy tener una habitación propia es un lujo costoso y reciente, solo posible para una minoría, incluyendo hombres y mujeres; pensar en un espacio de silencio y de respeto con el trabajo femenino intelectual sigue siendo una utopía para muchas amas de casa.
Frases de Cristina de Pizán
- Así como los cuerpos de las mujeres son más suaves que los de los hombres, su comprensión es más aguda.
- En cuanto a aquellos que afirman que es gracias a una mujer, la dama Eva, que el hombre fue expulsado del Paraíso, mi respuesta a ellos sería que el hombre ha ganado mucho más a través de María de lo que nunca perdió a través de Eva.
- ¿Cuántas mujeres no hay que, debido a la severidad de sus maridos, desgastan sus vidas en un matrimonio que les causa un mayor sufrimiento que si fueran esclavas de los sarracenos?
- Sola estoy, y sola me quiero quedar/ Sola mi dulce amor me ha dejado/ Sola estoy, sin amigo ni compañero/ Sola estoy, en duelo y enojo.
Los derechos de las mujeres se han ganado muy recientemente, miremos
1789, Declaración de los Derechos de la Mujer y de la Ciudadana.
1900, participación de las mujeres por primera vez en los Juegos Olímpicos, en París; pero solo 22, y solo en golf y tenis. Recordemos la fotografía tomada en 1960, de unos hombres empujando a una mujer porque participaba con ellos en una maratón.
1918, aprobado el voto femenino en Inglaterra.
1920, aprobado el voto femenino en Estados Unidos.
1932, en Colombia, bajo el gobierno del presidente Enrique Olaya Herrera, la Ley 28 le otorgó a la mujer el manejo a de sus propios bienes.
1954, aprobado el voto femenino en Colombia.
1979, Convención para la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer (Naciones Unidas).
Ana Cristina Vélez
Estudié diseño industrial y realicé una maestría en Historia del Arte. Investigo y escribo sobre arte y diseño. El arte plástico me apasiona, algunos temas de la ciencia me cautivan. Soy aficionada a las revistas científicas y a los libros sobre sicología evolucionista.