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Voto útil

Las elecciones presidenciales en Colombia están bien planteadas. Excluyendo la tétrica reelección, que implica poner de facto a trabajar al Estado en función del candidato-presidente, la elección presidencial es una donde prima el voto de opinión. Los debates son públicos, televisados y ampliamente seguidos, la población se moviliza mostrando los menores niveles de abstención comparados y a través de la segunda vuelta se permite que nunca el candidato con más resistencias pueda ganar. La habilidad de los candidatos para obtener apoyos y desarrollar coaliciones políticas le deja claro al electorado los dos grandes bloques armados. En 2010 fue el de la educación vs. el de la seguridad y en 2014 el de la paz política vs. el de la paz militar.

Las elecciones regionales son otro cuento. Entre cientos y miles de candidatos para alcaldías, gobernaciones, concejos, asambleas y JAL, el debate público se descentraliza tanto que se pierde. Pasa de lo político a lo administrativo, y en muchos casos, las finanzas del municipio, la capacidad gerencial o la hoja de vida de un candidato son menos relevantes para el electorado que los grandes temas de la nación. Parte gruesa de los votantes no está familiarizado con las posibilidades reales de los candidatos, y para ellos dirijo esta columna.

Usted, señor lector, vote por quien desee votar, pero en Medellín y Antioquia tenga en cuenta lo siguiente:

– La Alcaldía de Medellín está entre Juan Carlos Vélez del Centro Democrático y Federico Gutiérrez del movimiento independiente Creemos. Ambos tienen cercanía al uribismo, pero mientras el primero apenas llegó hace 1 año a la ciudad de su largo trabajo como congresista y pretende ser una copia del ex presidente Uribe (los uribistas ya saben cómo termina eso), el segundo ha demostrado gran conocimiento de ciudad, soltura en el debate público y mucha mayor independencia frente a Uribe que el primero. Las encuestas internas indican que Juan Carlos Vélez es fuerte entre los muy pobres (estrato 1) y los muy ricos (estrato 6), mientras Federico gana con soltura entre la clase media (estratos 2 a 5). Un eventual gobierno de Federico sería muy parecido a un gobierno de técnicos e independientes como el de Sergio Fajardo entre 2004-2007, aunque con un mayor énfasis y comprensión del tema de seguridad urbana.

Por tanto, si usted desea un alcalde intransigente, dedicado a hacer oposición política al gobierno nacional y que posiblemente descuide la agenda local, vote por Juan Carlos Vélez. Si busca un Alcalde independiente, que le dé énfasis al problema de seguridad pero también al de las desigualdades sociales, que no entregue burocracia a politiqueros y que sepa trabajar con el gobierno nacional (porque es necesario e indispensable) vote por Federico Gutiérrez. Rico, Alonso y Hoyos (los otros candidatos) no tienen opciones. Sin segunda vuelta, el voto útil es imprescindible. Por claridad con quienes me leen (y habiéndolo manifestado anteriormente) mi voto es por Federico Gutiérrez.

– En Antioquia el panorama es menos claro. La imposibilidad de tener encuestas con márgenes de error bajos implica guiarse por el presentimiento y los sondeos poco fiables realizados. La Gobernación de Antioquia está, posiblemente, entre el conocido (pero por sus cosas malas) Luis Pérez de la Unidad Nacional y el prestigioso ingeniero Federico Restrepo del fajardismo. Ambos son como el agua y el aceite. El primero con una vida pública relacionada con la ilegalidad (recientemente, en un libro de una periodista bogotana, se explica su relación con Pablo Escobar), y el segundo con una vida que ha girado en torno a lo público-privado sin tacha. Desde el inicio de esta campaña, Federico Restrepo ha mostrado sus propiedades y declaración de renta. De Luis Pérez tenemos pista que es millonario por algunas propiedades encontradas husmeando en registros catastrales de Antioquia y su manera ostentosa de hacer campaña en helicóptero. Después de 4 años de gobierno de Sergio Fajardo, con un enfoque decidido en la educación como motor de la transformación, de lucha contra la corrupción y de promoción de la competitividad con infraestructuras y proyectos de iniciativa público-privada, sería una involución total que Luis Pérez llegase a destruir lo construido. Andrés Guerra, el buen candidato del uribismo, llegó tarde a la contienda y posiblemente le espera en el futuro una carrera política destacada en el departamento; pero hoy es momento de elegir por convicción o por voto útil al más posibilitado para que no gane Luis Pérez y sí gane la gran transformación que se está llevando a cabo en el departamento. En este caso, salgo a votar por Federico Restrepo.

Para complementar este ejercicio, que considero es de realpolitk pero también de transparencia con los lectores, hago público mi voto al Concejo de Medellín por Andrés López del movimiento independiente Creemos con el número 4.  A la Asamblea de Antioquia y por diversidad democrática voto por Ana María Moreno, del Centro Democrático con el número 51. Ambos son jóvenes, le apuestan a la promoción de la competitividad y al empleo enfocado en los recién egresados. Espero que ganen y cumplan con sus propuestas, conocerlos da muestra de que si lo harán.

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