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Seguridad y percepción

Por: CAMILO ARANGO (@camiloarangoo)

La gestión de la seguridad por parte de las autoridades del ejecutivo en Colombia tiene algunos matices que la hacen especialmente compleja. Una de ellas es la diferencia que es posible evidenciar entre las cifras objetivas de seguridad y ocurrencia de delitos en el territorio, y la percepción de seguridad que expresan los habitantes de esos territorios donde, como es ya común en el país, se presentan grandes variaciones estadísticas en relación con la ocurrencia de los delitos. El mes pasado, la Red de Ciudades Cómo Vamos presentó el informe final de las encuestas de percepción ciudadana en los principales centros urbanos del país, y la lectura de los resultados en materia de percepción de seguridad permite realizar algunas reflexiones en torno a los retos que los gobierno locales, que aún tienen dos años de gestión por delante, y el gobierno nacional en cualquiera de los dos panoramas, reeleccionista o no, se deben trazar para reorientar su gestión hacia las demandas ciudadanas en esta materia en concreto.

Hay delitos que han dejado de ser una preocupación para los ciudadanos, no así para las autoridades. A la pregunta por cuáles son los problemas más graves en relación con la seguridad que se presentan en su barrio, el homicidio aparece solo en el quinto lugar en la escala de prioridades en el caso de Cali, en el séptimo en el caso de Medellín, y se torna casi irrelevante en el caso de Bogotá. En cambio el tráfico y consumo de drogas, la ocurrencia de hurtos callejeros y la existencia de pandillas, son los tres fenómenos que en mayor medida afectan la percepción de seguridad de los habitantes de los tres centros urbanos, sumado al hurto de carros y de residencias que aparece en un segundo escalón de prioridades.

Pero a la pregunta por la priorización de problemáticas, se sumó aquella que busca identificar las acciones que los ciudadanos esperan de las autoridades para el mejoramiento de las condiciones de seguridad. A la pregunta por cuáles deben ser las acciones para mejorar la seguridad en el barrio, los temas de policía vuelven a ser los más mencionados en el caso de las tres ciudades, ya sea a través del aumento del pie de fuerza en el territorio, incremento de la infraestructura de policía o mejoramiento de la capacidad de respuesta de las autoridades; es un reclamo por la mayor y más eficiente presencia de las autoridades de policía en el territorio. Si a ello le sumamos que Cali es la única de las tres ciudades donde los encuestados afirmaron sentir que las autoridades están realizando acciones para lograr que su barrio sea más seguro, el reto está latente.

Armonizar las políticas y planes de seguridad con las demandas ciudadanas es prioritario. Quedan pendientes las reflexiones en torno a las acciones emprendidas por las autoridades locales en esta materia. Las problemáticas están definidas, lo pide la gente.De acuerdo con las encuestas, es lo que en materia de seguridad se percibe.

 

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