Esto mejora, pero no cambia

Publicado el Polo Díaz Granados

La regla de tres de un tumbe electoral; ¡Ahí te hablan Clara Luz Roldán!

Pa’ empezarles esta historia tienen que entrar al Instagram del alcalde de Salamina (un pueblito del Magdalena con un potencial electoral inferior a 8 mil votantes). José Díaz Marchena, el honorable primer mandatario municipal, publicó muy orgulloso el 12 de octubre de 2017 que había firmado un convenio con Coldeportes para la construcción de la plaza principal del municipio.

Como pueden verlo en la red social, el alcalde le dio el respectivo ‘chapazo’ (crédito pa’ los cachacos que me leen) a Kelyn González, representante a la Cámara del Magdalena y actual candidata a repetir curul, “por su apoyo incondicional para la consecución de este proyecto para el beneficio de la… ¿comunidad?”.

Con el billete asegurado de su lado –nada menos que 3 mil 679 millones de pesos– el alcalde corrió, ahí sí, a entregarlos de una manera que hasta el más inexperto investigador de cualquier ente de control se iría de para atrás con el montón de inconsistencias con las que se puede concluir, sin temor a equivocarse: ¡que ese billete se va a perder!

Para empezar, el contrato para reconstruir la plaza del pueblo se entregó como les encanta a los alcaldes: con el mayor esfuerzo que cuesta levantar un dedo y señalar a un beneficiario. ¿¡Pero cómo!? –dirá alguno de los 4 gatos que me lee– si con ese montón de plata en un pueblo tan pequeño, lo mínimo que debe hacerse es una licitación pública que garantice la transparencia.

¡Pues bien!, el alcalde solucionó eso, primero, designando un alcalde encargado (¡por si las moscas!), y luegopromulgando una resolución con la que justificó por qué debía ser una contratación directa. ¿A que no adivinan? La justificación dice, entre otras cosas, que es que “el trámite de las licitaciones rebasan en demasía el justificado afán que le asiste a la comunidad en obtener prontamente los escenarios recreativos”. En pocas palabras… ¡Porque ajá!

La barrabasada de proceso de contratación quedó plasmada en el Secop bajo la referencia IA-MS-175-2017 que, como les dije, no aguanta la revisión de un ente de control: ¡Todo el proceso se hizo en 4 días!: el viernes 10 de noviembre de 2017 colgaron unos documentos y el martes siguiente, 14 de noviembre, -incluyendo fin de semana que no se trabaja- colgaron los estudios previos. ¡Tanto era el afán que ese mismo día, el contrato firmado con el beneficiado también lo colgaron junto a los estudios previos! (si no me crees, compruébalo aquí)

Pero cuando uno creería que no hay nada peor que estas inconsistencias viene lo peor del cuento: el contratista beneficiado resultó ser la Asociación de Municipios de la Subregión Ciénaga Grande de Santa Marta, la cual se ha graduado, según reportes de prensa, como una contratista corrupta, con visibles comportamientos irregulares que se pueden contar UNADOSTRES, y hasta CUATRO VECES. (Clic en los números para que te sorprendas)

¡Cómo será de inadecuada y riesgosa esta contratación, que el representante legal que firmó el contrato el contrato con el flamante alcalde José Nicolás Díaz Marchena fue el subdirector de la tal Asociénaga y no el director en propiedad…

Pues resulta que el verdadero director, Jorge Alberto Fernández Orozco, quien debería firmar el contrato, no puede hacerlo porque está inhabilitado para firmar contratos con el Estado hasta el año 2022. ¡Y por si eso fuera poco!, la Fiscalía lo ha reseñado en boletines de prensa como capturado en dos ocasiones por casos de corrupción. En una la mandaron pa’ la cárcel Modelo (ver aquí) y en la otra pa’ la del Bosque (ver aquí también), ambas en Barranquilla.

¡Pero qué importa! El alcalde es un bacán y está haciendo cosas por el pueblo, dirán los 2.814 salamineros que lo pusieron en el cargo. ¡Tanto así que es la hora y, aunque ya Coldeportes hizo el primer desembolso, por la plaza apenas han pasado un par de topógrafos a hacer unas mediciones de quién sabe qué!. ¡Ni el primer ladrillo han puesto!, aunque la nueva plaza deba estar lista el 30 de mayo de 2018.

Es aquí donde yo digo: ¡Clara Luz Roldán, Ahí te hablan!. En sus manos está que la plata de su entidad no se vuelva del bolsillo de otros. El tumbe se está dando frente a sus narices. ¿Es que acaso no le preocupa? Lo mínimo que debe hacer Coldeportes es aguantar los desembolsos mientras la situación se aclara. O al menos, mientras alguien que sepa de matemáticas me resuelva esta regla de 3:

– El alcalde de Salamina, José Díaz Marchena, agradeció públicamente a la representante a la Cámara del Magdalena Kelyn González por haber gestionado los millonarios recursos para esta contratación…

– Kelyn González es esposa de Rodrigo Roncallo, capturado por parapolítica…

– Rodrigo Roncallo es primo del alcalde de Salamina José Díaz Marchena…

– Kelyn González está en campaña justo ahora para aspirar, nuevamente, a la Cámara de Representantes.

– X= ¿Qué pasará con los 3 mil millones de esta obra?

¡Se la dejo ahí!

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