¿Harvard hundiría a los USA?

No hace mucho, en plena crisis kirchnerista, se difundió en la Argentina un indicador según el cual la Universidad de Buenos Aires (UBA) era la mejor rankeada de América Latina.

Y se me ocurrió formularle al rector de la UBA esta pregunta: ¿Por qué razón la UBA aparecía superior en Latinoamérica mientras la Argentina se hundía en la miseria sociopolítica? Por supuesto que el rector no respondió algo.[i]

En estas semanas, las academias de mayor prestigio en USA (y Occidente, tal vez), también se desnudaron incapaces de aplicar de manera constructiva sus valores democráticos fundamentales.

Circunstancias que llevaron a la presidente de Harvard, Claudine Gay, a renunciar por haberse “inclinado” a favor de las protestas pro-palestinas.[ii]

Y, al tiempo, a que la de Columbia, Nemat Shafik, conservara su puesto amenazando a los estudiantes protestantes con que “no iban a terminar su semestre en primavera del 2024, incluyendo no poder asistir a clases presenciales ni remotas o comprometerse en cualquier otra actividad asociada a Columbia University.” [iii]

Buscando paliar los daños, con buenas intenciones Harvard ha publicado los resultados de una primera autocrítica. [iv]

Los que a primera vista amenazan ser frustrantes. Todo porque la universidad se confiesa empeñada en conservar un valor fundante que, en esencia, es una ficción premoderna: “la búsqueda de la verdad” (femenina y singular).  

Los dos comités comprometidos en la autocrítica habrían puesto al desnudo cierta pereza intelectual determinista, que amenazaría hundir a las más calificadas universidades (y, de paso, a sus sociedades).

Acogiendo saludables medios académicos como la libertad, la crítica abierta, la enseñanza y la investigación, Harvard seguiría hacia el abismo cuando confiesa que trabaja por alcanzar una no sabemos cuál verdad.

Las explosiones en los campus de mayor renombre por estos días, contribuirían a confirmar el clima de creciente frustración entre la población de graduados y postgraduados universitarios en todo el mundo.[v]

Dirigir como lo propone Harvard, loables medios hacia fines falaces, amenazaría seguir entrenando estudiantes para administrar un planeta cada vez más complejo, aplicando herramientas esquizoides como esta de la verdad única heredada de Newton y sus pares.

Advertencia. Confirmando algo de lo antedicho, la página de Harvard ha rechazado que el blog conecte con esta fuente de la universidad: news.harvard.edu/gazette/story/2024/05/when-should-harvard-speak-out

Congótica. Es válido que la educación se presente como bandera de las transformaciones sociales.

Congótica 2. Pero cuando, en realidad, la educación se desnuda amarrada a creencias premodernas que dificultan, no contribuyen, a entender la complejidad presente, también conviene precisar sus responsabilidades en las crisis.

Congótica 3. Convendría preguntarnos qué tanto la proliferación de wokes, fakes, bulos o como se les llame. actuadas por DJ Trump, VPutin o AUribe que se dicen haber pasado por la academia, podrían explicar parte del problema actual.

Congótica 4. Las universidades de renombre probaron, otra vez, la máxima de Warren Buffet según la cual: cuando la marea baja, nos damos cuenta de quiénes se bañaban desnudos.

[i] Estaríamos a punto de probar que allá en USA como por otros lares, se eligen rectores universitarios incapaces de responsabilizarse o de que cuando lo hagan, se equivoquen de solemnidad.

[ii] https://www.nytimes.com/2024/01/03/books/review/claudine-gay-harvard-resignation-letter.html    Consulta de mayo 29 2024,

[iii] COLUMBIA UNIVERSITY IN THE CITY OF NEW YORK, Apr 29 2024, NOTICE TO ENCAMPMENT

^[iv] https://www.nytimes.com/2024/05/28/us/harvard-university-statements-empathy.html

Consultas de mayo 28 2024

[v] Congote, B. (2024). ESPECULACIONES SOBRE CIERTO CLIMA DE FRUSTRACIÓN DETECTABLE EN UNIVERSITARIOS PRE Y POSTGRADUADOS.  Bogotá: Revista Tecnogestión: Una Mirada al Ambiente. Volumen 20. Número 1. 2023. Disponible en www.udistrital.edu.co/revistas.