De la industrialización a la desindustrialización.

Por: Hernán González Rodríguez

Durante la Segunda Guerra Mundial, las industrias de Estados Unidos y de Europa se dedicaron a armar sus ejércitos y nuestras importaciones se dificultaron. Recuerdo que casi no había vehículos para importar a Colombia. Como resultado de la escasez no solo de vehículos sino de muchos otros bienes, se tornó propicio el ambiente internacional para la fabricación en el país.

Nuestros gobiernos protegieron la industria nacional por medio de los aranceles. Los dólares provenientes de los buenos precios del café nos permitieron importar maquinaria. Medellín fortaleció sus industrias de bienes de consumo, en especial, los textiles y las confecciones.

Tras la fundación en 1960 de la Asociación Latinoamericana de Libre Comercio (ALALC) algunas multinacionales importantes abrieron plantas en Colombia para participar en esta asociación y contribuyeron a nuestra industrialización.

De acuerdo con el Dane la industria colombiana alcanzó a participar con el 20,5% del PIB en 1975 y cayó al modesto 10,0% en 2022. A partir de 1975, cerraron sus fábricas o abandonaron nuestro país 60 empresas importantes. Algunas de ellas:

  1. Mazda. 2. Gillette. 3. Uniroyal. 4. Colgate Palmolive. 5. Icollantas. 6. Laboratorios Abbot, Roche y Wyeth. 5. Calzado la Corona. 6. Coltejer. 7. Fabricato. 8. Tejicóndor. 9. Caribú. 10. Coltabaco. 11. Pilas Eveready. 12. Phillips. 13. Bicicletas Monark. 14. Metalmecánica Furesa. 15. Electrolux. 16. Empresas metálicas de Palmira. 17. Chiclets Adams. 18. Kraft Foods. 19. Lavadoras Hoover. 20. Siderúrgica del Pacífico, Sidelpa…

Sobresale, en mi opinión, como culpable entre las numerosas causas de esta desindustrialización el Globalismo y su herramienta los Tratados de Libre Comercio (TLC). Ha firmado Colombia 17 acuerdos vigentes con 65 países. No pocos de estos tratados son fuente de competencias desleales con grandes ventajas para los exportadores tales como:

  1. Las devastadoras devaluaciones hasta del 50% para permitir exportar a precios cercanos a los de producción y obtener grandes utilidades al convertir los dólares en moneda local. b. Los créditos baratos. c. Los subsidios directos. d. Los menores impuestos. e. Los bajos precios de la energía y demás servicios públicos. f. Los seguros contra las inclemencias del clima sobre sus exportadores. g. Mantener los precios de venta bajos hasta quebrar las empresas domésticas para apoderarse de sus mercados y, finalmente, elevar sus precios, el ´dumping´.

Los TLC son difíciles de negociar, interpretar y aplicar. Reducen la soberanía de los países para sostener el empleo en favor de la poderosa Organización Mundial del Comercio (OMC).  Perjudican las medianas y las pequeñas industrias. Causan crisis en el sector agropecuario. Son los culpables de la precarización laboral en los países en desarrollo. Nos demuestran el fracaso de los TLC las grandes migraciones de los países pobres e importadores hacia los ricos y exportadores.

Conclusión. Entre las numerosas causas de nuestra pobreza y de nuestra desindustrialización sobresalen los 17 TLC vigentes, el contrabando y las importaciones subfacturadas con los dólares del narcotráfico.

Avatar de Hernán González R

Comparte tu opinión

1 Estrella2 Estrellas3 Estrellas4 Estrellas5 EstrellasLoading…


Todos los Blogueros

Los editores de los blogs son los únicos responsables por las opiniones, contenidos, y en general por todas las entradas de información que deposite en el mismo. Elespectador.com no se hará responsable de ninguna acción legal producto de un mal uso de los espacios ofrecidos. Si considera que el editor de un blog está poniendo un contenido que represente un abuso, contáctenos.