El Mal Economista

Publicado el EME

Vecinos en apuros

Por: Rodrigo Torres

@RodrigoJTorres

Hace un par de días me vino a la mente una frase que oí de un profesor hace un par de años: “el qué tan bien uno está depende de cómo esté el vecino”. Este ilustre personaje utilizaba esta frase de manera jocosa para comparar su status socioeconómico con el de la familia de su esposa venezolana, agregando que le resultaba gracioso cómo había ganado un poco más de respeto entre sus cuñados en los últimos años producto del deterioro de la economía del vecino país.

Pues bien, en esta época de fin de año es común ver cómo los medios informativos, los departamentos de estadística y los grupos de investigación cierran sus balances de lo transcurrido en el 2014 en materia económica y reajustan sus proyecciones para el año próximo.

En el barrio mundial hay una cuadra que llama la atención, pues de un momento a otro dejó de ser una de las manzanas más prósperas del vecindario. Uno de los vecinos ha venido mejorando su situación económica desde hace algunos años y esta navidad se jacta de haber aumentado sus ingresos en lo corrido del año en cerca del 5% mientras continúa tratando de resolver, de manera incierta, un conflicto interno que le aqueja desde hace un buen tiempo.

Distinta es la suerte de los vecinos de la casa de al lado, quienes tienen un jefe de hogar cuya forma de llevar las riendas fue tan poco eficaz como su expresión oral. Además, estos vecinos ven de manera preocupante cómo su situación se deteriora producto de que las cosas no andan bien en cuanto a su principal, y prácticamente única, fuente de ingresos. Los demás miembros del hogar protestaron a viva voz este año, pero lastimosamente no sirvió de mucho.

Similar es la situación de varios de los vecinos de la cuadra, incluso se vio cómo uno de ellos dejó de pagar sus deudas una vez más, empeorando aún más su reputación. Análogamente, el hogar de la familia Brasil quedó mal cuando fueron los encargados de organizar las justas deportivas del barrio en medio de una fuerte división interna.

A esto debe sumársele el hecho de que se espera que los ingresos del hogar caigan en el primer semestre del 2015. Preocupaciones similares aunque menores son las de Chile, una de las familias más prósperas del barrio a la que este año no le fue tan bien como de costumbre, por lo que deberá buscar la manera de volver a sus mejores años en materia económica.

En suma, Colombia puede estar tranquila por haber hecho bien las cosas y fortalecer su reputación. Sin embargo, deberá tomará tomar una decisión en cuanto a los conflictos que hay en su interior para no dar largas a asuntos que por momentos parecen no conducir a ningún lado.

Esto sumado a las preocupaciones para el jefe del hogar (el Gobierno) que se derivan de la disminución de sus ingresos por cuenta de la situación actual del mercado del petróleo, una de sus principales fuentes de ingresos. Por tanto, Colombia deberá estar atenta el próximo año para no dormirse en los laureles, máxime si se tiene en cuenta que su éxito en el año que termina puede ser sobreestimado producto de la mala racha que atraviesan sus vecinos.

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