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Publicado el El Mal Economista (EME)

Los recursos para emprendedores TIC se han ido para los empresarios de las aceleradoras

Por: Álvaro Narváez (@narvalez)

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Ya se han convertido en iconos de la corrupción en Colombia casos como el de Agro-Ingreso seguro (AIS) programa que fue creado para apoyar a los campesinos y ayudarles a lidiar con los tratados de libre comercio y la globalización, pero que  terminó beneficiando a familias adineradas, empresarios y hasta una actriz de telenovelas. Según investigaciones, el desvío de recursos en AIS pudo ascender a los $300 mil millones de pesos [1], a este caso se le suman situaciones similares en otros sectores como lo sucedido en la salud en el caso de la EPS: Saludcoop, entre otros.

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Fuente: El Clarín

Estos casos han dejado un sin sabor entre burócratas a la hora de plantear programas para pequeños empresarios de diferentes sectores para evitar acusaciones por irregularidades en la ejecución de recursos, contrataciones sin los debidos estudios y detrimento en el erario.

En este contexto, actualmente el sector de pequeñas empresas con componente digital y tecnológico –conocidas como startups- que el gobierno dice apoyar a través de reconocidos programas de aceleradoras, están  presentando una brecha entre lo publicitado, lo invertido y los resultados que efectivamente se están logrando con estos programas. Teniendo de precedente los perversos efectos de AIS, el gobierno ha evitado endosar recursos en especie o monetarios a las pequeñas empresas y por el contrario se ha inclinado por orientar los recursos a la financiación de empresas que prestan servicios de consolidación y aceleración y que actúan como intermediarias entre el gobierno y los emprendedores, sobre las cuales se desarrollan exclusivamente las ideas de este artículo.

Las aceleradoras de semillas o aceleradoras de startups son instituciones para impulsar pequeñas empresas TIC mediante un programa que se basa en convocatorias con un plazo de tiempo estipulado. Estos programas incluyen asesorías por parte de expertos, formación, educación digital, tutorización por parte de la empresa, maratones de emprendimiento, bootcamps y la oportunidad de que las empresas realicen la presentación de su idea de negocio ante un grupo de inversionistas. Si bien, el ecosistema de emprendimiento TIC en Colombia es joven, cada vez son más las empresas que aparecen para ofrecer servicios de apoyo en ideación, prototipado, consolidación y aceleración, evidenciando que es rentable prestar estos servicios.

Al darle una mirada a la rendición de cuentas del Ministerio de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones en el 2014 [2], se firmaron contratos para el periodo 2012-2014 por 40 mil millones de pesos de los cuales se menciona que el 20% de los recursos fueron orientados a fase de aceleración, es decir más de 8 mil millones.

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Fuente: Elaborado con base en informe de rendición de cuentas MinTic 2014

Sin embargo, para ese mismo periodo las ventas de los proyectos acelerados representaron 1.287 millones, es decir el 15% de lo invertido, lo que evidencia falencias en la rentabilidad de estas inversiones. Si bien, se podría mencionar que falta tiempo para ver madurar la inversión, el problema radica en que también el tiempo puede ser el verdugo para estas ideas que no superen el Valle de la Muerte, el periodo en el que los emprendedores se quedan sin recursos de financiación para desarrollar sus proyectos y necesitan acudir a inversionistas para satisfacer sus necesidades de capital en proyectos que para crecer necesitan apalancamiento o sencillamente perecen.

A lo anterior se le suma, la aversión del sistema financiero tradicional a la financiación de los proyectos tecnológicos de las startups por considerarlos de alto riesgo o porque sus dueños, muchas veces jóvenes recién graduados de programas universitarios, no cuentan con el historial crediticio para soportar los cupos de endeudamiento.

En ese sentido, vale la pena revisar si apoyar a las entidades que ofrecen servicios de ideación, consolidación y aceleración para la formación de capital humano es lo más adecuado, o si mejor se reorientan estos recursos en el fortalecimiento de las instituciones del sistema de educación superior público existentes y se les incentiva a actualizar sus currículos y programas entorno al emprendimiento en ciencia, tecnología e innovación (CTeI en adelante), fortalecimiento de grupos de investigación en CTeI o se invierte en cerrar las brechas en el acceso a financiación por parte de los emprendedores y encontrar esquemas en los que se puedan brindar capital semilla a las empresas que generen beneficios sociales para la economía, ya sea a través de empleos, patentes, entre otros.

Referencias Bibliográficas

(1)    Recuperado el 13 de Agosto de 2016 de http://static.elespectador.com/especiales/2011/06/b827b0c8725d045e3274e6948355e22f/index.html

(2)    Recuperado el 14 de Agosto de 2016 de http://www.mintic.gov.co/portal/604/articles-4323_recurso_1.pdf

(3)    http://colombia-inn.com.co/las-aceleradoras-de-empresas-jovenes-ganan-terreno-en-colombia/

 

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