Parsimonia

Publicado el Jarne

Tierra adentro

El Interior es un libro de crónicas de Martín Caparrós que se acaba de reeditar en España en una cuidada edición gracias a la editorial Malpaso. Caparrós recorre esa Argentina que ya era Argentina -la tierra colonizada por los españoles- y lo que después se convirtió en Argentina -la tierra colonizada a partir de la independencia- dejando atrás ese Buenos Aires que estamos hartos de conocer para adentrarse en lo desconocido: El Interior.

El cronista recorrió una buena cantidad de kilómetros en sus viajes para mostrarnos esa Argentina que sólo aparece en los libros y que han formado el mito sobre los argentinos: de grandes extensiones de tierras, de hombres hechos a sí mismos, de la pampa y de las montañas de carne que podían dar de comer a medio mundo. En el camino se topa con puticlubs, barrios peligrosos, la soledad de la carretera y el deseo de escuchar y comprender algo mejor las Argentinas que existen.

A veces, muy a menudo, la crónica recuerda a Kapuscinski. Los dos estudiaron Historia y se nota a la hora de abordar los diferentes lugares. Nos acercamos a cada sitio desde una óptica histórica, aunque nuestro cronista incluye datos antropológicos, económicos o sociales. Se nota que no se ha limitado únicamente a contar lo que le ha pasado; Caparrós busca contextualizar las cosas que le van pasando. Y lo hace tan sencillo y bien como el polaco, donde todos esos datos fluían y enriquecían lo que iba sucediendo en el relato.

Nos vamos encontrando con el nuevo y el viejo país: esa idea tan Argentina y repetida de pensar en la patria cómo lo que fue y lo que pudo haber sido. Desfilan por el relato los últimos coletazos del Corralito, los barrios decadentes de la burguesía adinerada y venida a menos o los pueblos que se despoblan, la revolución de la soja, el fútbol o los problemas y vivencias diarios de millones de personas.

El Interior arroja luz sobre ese país gigantesco que tendemos a simplificar y a imaginarnos, más que a buscar historias o noticias que nos lo cuenten día a día. Caparrós dibuja ese mundo que existe más allá de Buenos Aires, rompe la frontera imaginaria y traza paso a paso para esbozar la realidad de la mejor forma que puede, según lo que le va ocurriendo y lo que le van contando.

Resumiendo: una delicia.

En Twitter: @Jarnavic

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