Las niñas cristal se bañan con jabón de avena y huelen a jazmín de noche.
Jamás pierden su capacidad de asombro. Son constantes y sutiles; nacieron antes de tiempo, porque trascendieron el orden impuesto a los demás, entendiendo que están hechas para tomarse de la mano, generar tranquilidad... Ver post completo.
Lloronas de abril
Ojos color sol
Por: Mary Ramírez
Ojos color sol. De esos cálidos, resplandecientes, luminosos; cual par de estrellas casi imposibles de alcanzar. Dos sonetos de versos de arte mayor.
Ojos color sol. Dulces, viscosos como la miel, pero igual de peligrosos como el polen de esos venenosos. ¿Por qué? Porque... Ver post completo.
Mirarte en la esquina
Te recuerdo con voz dulce y cómoda. Sentado ahí, en una banca sin más, en medio de un mar de caras que con profunda tristeza despedían a un ser querido.
Pero nosotros no estábamos en ese contexto.
Te recuerdo generoso con el tiempo y con la palabra, con tu mirada profunda y ese delicioso... Ver post completo.
La nominada
Por fortuna, mujer, tienes incrustada en la piel la idea de un amor radical y sin miedos. Sin duda, es la que debe seguir moviendo tus días.
A los demás les enseñaron risas burlonas para el cálculo de los pasos, los convocaron a rayar una libreta de apuntes con códigos descifrables y sin... Ver post completo.
Que el corazón se sienta como en casa
Por: Pep Sanchis C.
Para los recién casados, Carlos y María del Carmen
La vida necesita de caricias y abrazos, de música y de amor.
Ante un momento tan decisivo es necesario librarse de prejuicios que conducen a errores e imprecisiones que durante siglos han dormido en el ser humano. Finalmente,... Ver post completo.
Las guerras propias
Por: Adriana Patricia Giraldo Duarte
Hay almas con guerras propias que presionan sus pasos y aceleran los miedos con sirenas, que reducen el tiempo y se meten obligados a un sótano con desconocidos.
Hay otras almas que no le dan el lugar a la libertad, ni las gracias al ejercicio privilegiado... Ver post completo.
Almas del tiempo
Por: Adriana Patricia Giraldo Duarte
Cualquier tarde el tiempo corre con menos fuerza para darnos lecciones.
Se detiene ahí, cavando metros bajo tierra y nos obliga a mirar hacia arriba, hacia al lado, a buscar las luces, a entendernos en la mirada de los que escarban en sus propias culpas, o... Ver post completo.
La esquina de los libros
Por: Adriana Patricia Giraldo Duarte
En la esquina de los libros, la que habita cada noche cuando cierra los ojos y se empeña en ser feliz y en mantener su alma vibrante, allí donde solo parece triunfar la oscuridad, Luz Idalba Toro se siente personaje vivo de todos los libros que ha leído en los... Ver post completo.
Tres soles
Por: Mary Ramírez
Son tres soles y ya me acostumbré a tu voz; tan natural, decidida, auténtica y autoritaria.
Basta que pasen los minutos para esperar con ansias un par de palabras, esas que me anuncian que me piensas y que, al mismo tiempo, evocan un silencioso suspiro.
Llegaste a acaparar... Ver post completo.
La luz del segundo día
Por: Adriana Patricia Giraldo Duarte
Un día vamos a vernos, Guillermo, para que me expliques cómo logras sobre mi este efecto hipnotizante que es como el mismo del sol a primera hora, cuando te presento las palmas de las manos y siento el ímpetu que corre por la piel y avanza para motivar el día.
Estás... Ver post completo.