Utopeando │@soyjuanctorres

Publicado el Juan Carlos Torres

La Colmena Humana

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Una sociedad que cree en abejas que se hipnotizan e instruyen, es la muestra del fanatismo que prefiere creer y divulgar un rumor, a investigar y deliberar. La invención del bioterrorismo es igual de pintoresca a la del castrochavismo, ambas constituyen un atentado contra la razón y la inteligencia humana.

Llegar a la Loma (Cesar), un territorio pobre, explotado, condenado al subdesarrollo, con un daño ambiental irreparable y burlado con el espejismo de la riqueza minera, y recibir un ataque de la naturaleza cuando has auspiciado el desastre; que el ataque sea de abejas, especie en riesgo por aspersiones con glifosato, cuando eres paladín de las fumigaciones; y, llegar a un centro de salud sin medicinas para la atención de las personas afectadas cuando promoviste la Ley que convirtió en negocio la salud y en cliente al paciente, es más que un hecho fortuito, Ley del Karma que le llaman.

Siguiendo el sentido pintoresco que nos caracteriza, el pueblo decidió ser como abejas, no ir a ver ballenas y no ser marrano. Las abejas decidieron proteger la colmena de la democracia, salir en busca del polen que forje la esperanza y alimente el futuro, y de polinizar la paz.

Seamos como las abejas africanas que llevaron a Mandela a desmontar las estructuras sociales y políticas heredadas de la desigualdad social y la esclavitud. Trabajemos incansablemente como las abejas obreras para producir miel para todos, con justicia social y equidad.

Seamos limpiadores como las abejas. Limpiemos la corrupción, la guerra y la cizaña que abundan en la colmena. Seamos abejas nodrizas, alimentemos la esperanza y el cambio entre más ciudadanos, para que se aúnen a este gran pacto por el respeto al medio ambiente y a los derechos de todos.

Seamos cereros como las abejas. Produzcamos la cera con que se construyen las colmenas para reconstruir las instituciones, la salud, la educación, la justicia, el agro y la democracia. Seamos defensores como las abejas que vigilan en sus piqueras de ingresos a los panales para que nadie moleste sus colonias, cuidemos los votos y combatamos el fraude, que nadie nos robe la miel.

Seamos forrajeros como las abejas que salen de la colmena a buscar el néctar, polen, agua y propóleos; salgamos a buscar el cambio, a forjar la justicia social y la equidad, a luchar contra la corrupción y a defender la paz, los ingredientes que necesita nuestra colmena humana.

Luchemos contra las ratas que suelen penetrar las colmenas atraídos por la miel que roban, royendo los panales y dejándolos inservibles; contra los sapos que llegan a las colmenas a engullir abejas y contra los piojos que las parasitan, contaminándolas para impedir que éstas realicen sus tareas.

Seamos polinizadores como las abejas, fabriquemos nuestro alimento, limpiemos la corrupción de la sociedad, protejamos el medio ambiente, vayamos hacia el néctar de la vida; no seamos como las ratas, los sapos y los parásitos que devastan la colmena.

Twitter: @soyjuanctorres

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