MEJOR ELIMINAR LA FISCALIA
Por Mauricio Luna Bisbal
Que yo sepa, antes de la creación del cargo de Fiscal General, existía el cargo de Director Nacional de Instrucción Criminal, el cual siempre fue ocupado por abogados penalistas, muchos de ellos con larga experiencia en la rama judicial.
Que yo sepa,nunca un Director de Instrucción Criminal se lanzó como candidato a la Presidencia de la República. Era un cargo de gran responsabilidad bajo un enfoque de preparación permanente y eficiencia.
Que yo sepa, este funcionario nunca mereció grandes entrevistas en los medios periodísticos.Obviamente, por encima de su nivel burocrático se encontraba el ministro de Justicia, el viceministro de Justicia y el secretario general del ministerio,
Que yo sepa, era prácticamente un funcionario casi desconocido fuera del mundo judicial.
Que yo sepa, la reforma constitucional del año 91, con la creación del cargo de Fiscal General,
elevado a disposición constitucional, despertó un apetito desmesurado y nutrido en fundados e irreversibles temores, entorno a la escogencia de este nuevo altísimo funcionario.
Que yo sepa, la mayoría de los Fiscales Generales no provienen del estudio y práctica especializada del derecho penal, ni del derecho procesal penal, ni de la criminología forense ni de la criminalística, ni de la medicina legal – fuente inagotable de aportes serios al derecho probatorio-..
Que yo sepa, en la última escogencia de Fiscal General fue abrumadoramente derrotado el candidato más preparado para el cargo y la persona más indicada para saldar la deuda histórica por la masacre cometida en 1985 contra los funcionarios y particulares sorprendidos en el Palacio de Justicia de Bogotá.
Que yo sepa, en los magistrados que dieron su apoyo al hijo penalista del sacrificado Presidente penalista de la Corte Suprema de Justicia, en 1985, sí hubo esa voluntad y grandeza para satisfacer esa deuda histórica, pero fueron derrotados.
Que yo sepa hay derrotas que enaltecen.
Que yo sepa,para todos los relacionados con el derecho penal, habría sido un homenaje póstumo extensivo a todas las familias de los ilustres sacrificados.
Que yo sepa, de haberse dado ese homenaje póstumo, no estaríamos en este pantano de impedimentos.
Que yo sepa, la escogencia del fiscal debe dejar la sensación de querer realmente investigar y clarificar.No lo contrario.