MENTEFACTO

Publicado el Joseph Aldemar Casañas Angulo

UNA TIERRA DE AMBIVALENCIAS

Se cumplen 473 años de fundación de un territorio bautizado como Bogotá, más que conciertos, eventos y aglomeraciones que intentan despertar una pertenecía que quizá no se siente, los habitantes de esta ciudad son auténticos guerreros. En todo caso feliz cumpleaños Bogotá.

Bautizada por el naturista y explorador alemán Alexander Von Humboldt, como la Atenas de América por las numerosas instituciones culturales y científicas que encontró en esta zona del país, Bogotá es la ciudad de las ambivalencias.

Odiada y amada por muchos, alabada por ellos y satanizada por aquellos, una tensa calma la hace peligrosa y hostil por las noches, pero una agitada combustión la hace indiferentemente activa y sagaz bajo los tímidos rayos del sol en las horas del día.

Es la ciudad de todos y de nadie; por consecuencia histórica es de los ‘rolos’, pero por obligación laboral, académica, turística e incluso huyendo de los pistoletazos de la violencia, la capital de la República ya es de vallunos, paisas, santandereanos, costeños, opitas, pastusos, boyacenses; porque nos guste o no, la selva de cemento es la ciudad en donde se buscan las oportunidades.

Es la zona prohibida, la región prohibida, viven todos pero no todos saben vivir, es un espacio complejo en el que no sólo el fuerte sobrevive, pero si tiene más posibilidades de hacerlo.

Como afirma el escritor bogotano Mario Mendoza en su libro La Locura de Nuestro Tiempo…”el asunto se complica cuando uno tiene que confesar un amor por una ciudad como Bogotá, pobre, fría, sin amar, déspota y, para empeorar las cosas con fama de violenta. Es como estar enamorado de una cabaretera vulgar con una vida inconfesable.”

Es más fácil sugiere Mendoza, imaginarnos una declaración de amor a ciudades como París, Nueva York o Barcelona, ciudades encantadoras y hermosas con motivos suficientes para enamorarse de ellas.

Pero la perfección es aburrida, y el amor que profesan  los que nacen por estas “ahuecadas tierras” es sin duda sincero, es un amor verdadero, visceral y carente de romanticismo pero lleno de racionalidad. Sin duda alguna una contradicción contundente pero descaradamente evidente.

Son más de ocho millones de almas las que ya deambulan por este espectro buscando y recuperando un sentido, son más de ocho millones de cosmovisiones lamentándose, riendo, sonriendo, anhelando, soñando y sobreviviendo, sin embargo los habitantes de esta metrópoli tienen claro como lo dice Jack London, que es preferible ser un meteoro y no un planeta estático y permanente porque el verdadero sentido de la vida está en vivir y no simplemente perder el tiempo sobreviviendo.

Pues bien así estamos en pie de lucha, declarando la guerra cada mañana al poner los pies en tierra y saliendo al ruedo en este territorio que cumple 473 años de fundación,.

Para bien o para mal los anaqueles de la historia la registran en 1538 a cargo de  un general español llamado Gonzalo Jiménez de Quesada, que cegado por el oro se topó con estas inexpugnables tierras.

http://www.youtube.com/watch?v=1Iti8tfoOGU

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