Han terminado los Juegos Olímpicos de verano de París y en Colombia, como cada cuatro años, los aficionados al deporte nos hacemos una pregunta natural, por qué el patinaje de ruta sobre ruedas, disciplina en la cual Colombia es potencia mundial, no es deporte olímpico, mientras el Comité Olímpico Internacional admite actividades como el Break Dance. La respuesta es compleja y hay pocas posibilidades que el COI admita el patinaje de velocidad, al menos en el corto plazo, pero hay una esperanza clara para Colombia, en los Juegos Olímpicos de Invierno.

Hace 10 años (febrero de 2014), publiqué en el blog que llevo en El Espectador, un par de artículos en que proponía que Colombia comenzara a preparar deportistas para que compitieran en las pruebas de patinaje de velocidad sobre el hielo, en los Olímpicos de invierno. Lamentablemente por un cambio en la plataforma en la que se guardan las entradas de los blogs, no se pueden consultar actualmente, por lo cual retomo el tema. Recordaba que Colombia debutó en los juegos de invierno en 2010 en Vancouver, Canadá, a través de una deportista con lazos familiares y afectivos con nuestro país, Cynthia Denzler, colombo-estadounidense quien participó en la disciplina de Slalom, pero era una iniciativa individual, no el fruto de un plan estructurado de las entidades colombianas.

Sin embargo, la posibilidad de participar en los Olímpicos de Invierno con el patinaje de velocidad sobre el hielo, se basaba en la experiencia acumulada en el patinaje sobre ruedas, impulsando una transición de una disciplina a la otra. Cuando lancé la propuesta, copié a la Federación de Patinaje y al Comité Olímpico Colombiano (COC), invitándolos a preparar una selección de patinadores de velocidad en hielo que con el apoyo necesario pudiera emular los logros que han convertido a nuestro país en potencia del patinaje sobre ruedas.

La propuesta se apoyaba en el ejemplo de Corea del Sur, cuyos patinadores se destacan tanto sobre ruedas como en hielo. Incluso recordaba la experiencia de Jamaica, país caribeño, en la disciplina de Bobsleigh (una modalidad del descenso en trineo), en los juegos de Calgary de 1988 -que inspiró la película “Jamaica bajo cero”-. Una experiencia que pasó de extravagante a exitosa, pues Jamaica logró en el 2001 el campeonato del mundo en la especialidad. Esto se dio, porque en ese país hay un juego tradicional con trineos sobre tierra.

Recuerdo que cuando lancé la propuesta, algunas personas la tacharon de utópica, diciendo que era imposible que Colombia, como país tropical, estuviera en unos Juegos Olímpicos de Invierno, descartando que se pudiera hacer de manera seria y como resultado de un plan estructurado. Sin embargo, tuve la agradable sorpresa que la Federación de Patinaje, me respondiera a través de lo que algunos seguimos llamando Twitter, en esta breve correspondencia que reproduzco a continuación:

  1. Dixon Medellín @Dixonmedellin  47 min

@Fedepatinaje @IndeportesAnt @OlimpicoCol Algún día podríamos tener patinaje colombiano en Olímpicos de Invierno? http://blogs.elespectador.com/lineas-de-arena/2014/02/06/colombia-en-los-juegos-olimpicos-de-invierno-utopia-o-gran-posibilidad/ …

@Dixonmedellin En eso ya trabajamos!!!

@Fedepatinaje Felicidades! Como todo proceso al comienzo habrá dudas, dificultades y desmayos, ¡pero al final habrá buena cosecha! Gracias.

Isabella Vargas e Isabella Caicedo.

Han pasado diez años y lo interesante es que esa idea inicial, ya es una prometedora realidad. Colombia ha participado en varias pruebas del patinaje sobre hielo en diversas competencias, recordando al pionero Pedro Causil. En enero del presente año, las patinadoras Isabella Caicedo e Isabella Vargas compitieron en los Juegos Olímpicos de la Juventud en Gangwon en Corea del Sur, en una delegación con un total de 5 deportistas. En los Juegos Olímpicos de Beijing de 2022, se participó con Laura Gómez, destacada patinadora oriunda del Carmen de Viboral. Ahora bien, en 2022, Laura Vargas obtuvo una medalla en skeleton en la Copa Norteamérica en Whistler, Canadá. 

Diego Amaya.

Pero sin duda, el hecho histórico es la plata lograda por el patinador Diego Amaya en los Juegos de la Juventud de 2020, quien demostró que sí es posible hacer la transición del patinaje de rudas al de hielo. Hay que resaltar el trabajo de Sebastián Uprimny, coordinador de deportes de invierno de Colombia y quien representó al país en esquí de fondo en los juegos de 2018 en Pieonchang. Nuestro país debe seguir apoyando un trabajo serio y responsable que estoy seguro en el futuro, nos va a traer alegrías olímpicas. Emulando el título de una novela, esperamos “La medalla que surgió del frío”. 

Si algún día llegamos a ganar una medalla olímpica de cuenta del patinaje sobre hielo, no cobraré derechos de autor, sólo una sonrisa y un suspiro de satisfacción desde donde me encuentre. Como decía en uno de aquellos artículos: Soñemos, pero luego al despertar, trabajemos por el sueño.

Dixon Acosta Medellín

En Twitter: @dixonmedellin

Avatar de Dixon Acosta Medellín (@dixonmedellin)

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