La clave de la abundancia esta en dar “Para llegar a ser verdaderamente felices debemos aprender a eliminar factores que inducen tensión en la mente. La práctica de compartir reduce la tensión y así eliminamos el enojo y la avidez, el compartir es una ayuda material para nuestra felicidad”. Maestro Vasant V. Paranjpe en su…
“Para llegar a ser verdaderamente felices debemos aprender a eliminar factores que inducen tensión en la mente. La práctica de compartir reduce la tensión y así eliminamos el enojo y la avidez, el compartir es una ayuda material para nuestra felicidad”. Maestro Vasant V. Paranjpe en su libro Luz que Conduce al Sendero Divino.
La mayoría de los seres humanos hemos llevado durante toda nuestra vida una carga pesada, todo se nos dificulta, nos cuesta trabajo conseguir las cosas que deseamos. Nos hemos acostumbrado a privaciones, a anhelar lo que unos pocos tienen. Pero ya es hora de cambiar. Entonces lo primero que debemos hacer es abrirnos al Universo, fuente y proveedor inagotable de abundancia, en este caso abrirnos para recibir
El Universo, El Todo, Dios, la Energía, la Divinidad, como queramos llamarlo, es una fuente inagotable de abundancia. Es el origen de nuestros suministros y provee para todos y cada uno nuestros propios y maravillosos canales. Aceptemos esto en nuestra mente. Hagámoslo diciendo varias veces, en voz alta y mentalmente y todos los días: Ahora recibo toda la riqueza que la Fuente Inagotable del Universo tiene para mi. Y demos gracias al Universo.
Dar es la clave de la abundancia. Cuando compartimos con espíritu de humildad estamos dando el primer paso para recibir. Pero debemos tener en cuenta que lo que compartamos sea de nuestra propiedad. También para completar el ciclo debemos estar dispuestos a aceptar; dar y recibir.
Debemos darnos primero a nosotros mismos, si no estamos bien cómo pretendemos ayudar a otros a que lo estén.
Compartir tiene las siguientes connotaciones:
Es nuestro deber compartir, debemos agradecer a la persona que compartamos ella es la causa de nuestra bienaventuranza. No compartamos por fama o nombre, Que no sepa tu mano izquierda lo que hace la derecha.
Compartamos con quien necesita, esto se llama caridad; compartamos con quien no necesita, esto se llama generosidad. Veremos que en momentos de necesidad las cosas nos llegarán sin haberlas pedido.
Espiritualmente ayudar satisface nuestra alma y nos llena de bienaventuranzas. Sicológicamente nos hace pensar que nos sobra que tenemos abundancia y por ley Universal lo que demos se nos multiplicará
No hay ningún motivo para no compartir nuestros bienes, la fuente Universal de donde emana todo, es infinita e inagotable ¡y nos pertenece a todos!.
El Diezmo
A veces el diezmo se hace un asunto bastante complicado, en primer lugar hay algunas personas que colectan el diezmo y terminan gastándolo en su propio provecho. Como segunda medida, cuando una persona se gana una buena cantidad de dinero por algún negocio que hizo, sufre un conflicto enorme de conciencia para decidirse a diezmar honestamente.
Por supuesto que no estamos en contra del diezmo, el diezmo es la principal actividad del compartir, pero para evitarnos conflictos, analicemos de una vez por todas lo que podemos hacer con el diezmo. Podemos darlo a la iglesia a la que pertenecemos, podemos darlo a las familias necesitadas, podemos darlo a las familias no necesitadas, podemos darlo a una fundación que propenda por un bien común, podemos darlo a nuestra familia, podemos encontrar algún tío, un sobrino, un hermano, que esté pasando dificultades económicas. Podemos empezar por ayudar al familiar y luego a las personas y familias diferentes a la nuestra. También podríamos enviarlo a la persona que puso un anuncio que rezaba mas o menos lo siguiente: “Si desea aumentar sus ingresos en un ciento por ciento, envíeme el diez por ciento de todo lo que gana y se volverá multimillonario”. Bueno, la idea es que cada persona decida como debe entregar su diezmo, sin presiones de ninguna clase; pero hagámoslo visualizando que tenemos tanto, que podemos desprendernos fácilmente del diez por ciento y así creamos una conciencia de prosperidad.
No acumulemos en forma innecesaria
Acaparar o atesorar cosas significa desequilibrio. El desapego nos permite vivir de una forma sencilla y con pensamientos elevados.
Hacemos una recomendación especial, revisemos nuestras pertenencias una vez al año, por ejemplo nuestro ropero, si hallamos algo que no nos hayamos puesto durante un año, saquémoslo aparte y busquemos una persona que lo necesite y que sí lo vaya a usar.
Esquirla: Proponemos como complemento leer el libro “El Vendedor Mas Grande del Mundo” de Og Mandino. Es entretenido y pequeñito pero con una gran enseñanza.
larevolucionpersonal
Dhyanamurti
Correo electrónico: [email protected]
A mis 66 años he vivido muchas experiencias positivas y negativas. Durante mi corto camino de aprendiz de la espiritualidad (desde el año 1990 cuándo conocí mi Maestro) he tenido un cambio radical de 360 grados en la manera de vivir mis experiencias, y digo de 360 grados, pues tuve que desaprender y luego volver a aprender.
Hace 20 años mi vida parecía un libro de matemáticas, (muchos problemas). Hoy día los problemas todavía están ahí, pero ya no me afectan, he aprendido a manejarlos, a darles el valor que cada uno tiene y a transformarlos a mi favor.
Este pequeño rincón que la vida me ha regalado, es para usted, y para todos aquellos que están pasando dificultades, de cualquier tipo; económicas, físicas, mentales, emocionales, etc.
No estoy atado a ninguna religión, filosofía, ni política en particular. Mi religión son todas las religiones, creo profundamente en Dios, o en un ser Superior, llámelo como usted quiera llamarlo.
Respeto enormemente a todos los seres vivos, llámense presidentes o mendigos, como también a los animales, plantas e inanimados.
Aprendí a ser feliz con las cosas buenas que me da la vida, pero también acepto las cosas que de pronto no fueren tan “buenas”.
Actualmente vivo en una pequeña población cercana a la ciudad de Bogotá, en una pequeña finca, donde comienzo mi nueva profesión de Aprendiz de Campesino.
Los editores de los blogs son los únicos responsables por las opiniones,
contenidos, y en general por todas las entradas de información que deposite en el mismo. Elespectador.com no
se hará responsable de ninguna acción legal producto de un mal uso de los espacios ofrecidos. Si considera
que el editor de un blog está poniendo un contenido que represente un abuso, contáctenos.