Por: Clara Inés Chaves Romero (exdiplomática)
En esta solemnidad católica el arte salta a la vista, con desfiles de tallas de santos en madera, pertenecientes a diversos artistas del mundo, y en la cual la costumbre se impone, pues las personas que cargan las efigies sobre andas no improvisan; su oficio viene de generación en generación, de tal manera que su trabajo comienza el Viernes de Dolores y termina el sábado santo, con sus respectivas representaciones o «paso», actividad que se realiza desde 1556.