Santos era mi héroe hasta ayer.
Creía en él, voté por él. Pero resultó tan flojo y traidor como los demás. Los muertos que se van evitar con un posible negociado de paz con la guerrilla, se van a incrementar, duplicar o triplicar con el genocidio que se nos avecina con la tramposa y falsa Ley Estatutaria a la Salud, que junto a la criminal Ley 100, no respeta el más sagrado de nuestros Derechos Fundamentales: la vida.
La Ley Estatutaria de Salud, limita el acceso a la tutela que era un mecanismo para reclamar y pedir justicia frente a las mafias que manejan la salud. Frente a los miserables que convirtieron lo único que no se podía volver negocio (la vida) en el más vil de los negocios.
La nueva Ley, que ojala la Corte Constitucional ponga en cintura, limita el derecho a la salud a la capacidad de pago de la gente. Es decir, el que no tiene plata que se muera. Que se tome sus agüitas en casa y que ni se asome a morir con indignidad a las Empresas y Negocios de salud, donde vale y se atiende al que tenga plata. ¡Qué vergüenza!
El Ministerio de Hacienda, no dejó que se regularan los precios de los medicamentos. La corrupción de las empresas de salud que patrocinan políticos como si fueran jugadores de fútbol cuando están en campaña, para que vayan a patear goles contra la vida y la salud de los colombianos, ganaron. Les dio resultado. Metieron su gol. Ahora que se vengan los muertos, que ellos ya se llenarán de plata.
La Reforma de la salud, es un mostrenco fallido por remendar la Ley 100. La crisis en salud, según los expertos viene y será peor. Si hoy son miles de muertos por falta de atención, por mala atención, por tramitomanía para la atención, por leguleyadas y embelecos dignos de los más viles y canallas para posponer la atención hasta la muerte de cualquier paciente. Ahora sí, quedamos sin esperanza.
No habrá derechos adquiridos. No habrá dinero que alcance. Se privatizo el derecho a la salud, que es el Derecho a la vida. ¿Y nadie va a decir nada? Parece que todos estuvieran viendo fútbol.
Ah, pero que carajos. La noticia no es esa. La noticia es si se casan o no, un par de geis frente a notario. O la nueva novela de las mujeres prepago para que todas las niñas de casa aprendan a volverse prostitutas y salgan de la pobreza. O el reguetón de moda, para que bailando y bailando lavarles el cerebro a nuestra juventud para que se asuman como “cosas” inferiores a las mascotas.
El que tenga cesantías y llegó a la vejez, prepárese. Las empresas de la Salud, como gallinazos, y agentes de la muerte, ya se están preparando para saber cuánto dinero tiene usted ahorrado, y de acuerdo a eso lo atienden. Y ya preparan evaluadores, para saber cuánto cuesta su casa o su carro, o su moto, para poder atenderlo. Y si no tiene nada a nombre suyo, dispóngase a morir en un pasillo como un animal.
¿Hasta cuándo? … Y en Brasil van a tumbar un gobierno por subirle el transporte 2 reales. ¡Qué paradoja!