“Feliz día de la mujer, eres toda una belleza: inteligente, solidaria, alegre, elegante, compasiva. Eres íntegra porque has heredado todas mis virtudes”. Acto seguido llega el meme de una mujer irritada.
El primer mensaje que recibí hoy, a las 5 de la mañana, fue de mi mamá.
Yo soy de esas mujeres que se fastidian un poco cuando en el día de la mujer, el día de la madre o en cualquier otra fecha ilustrada con pantone rosa llegan al chat poemas e imágenes relativas a la belleza y fragilidad femeninas.
Suspiro impaciente ante cada flor con escarcha o alusión a las razones por las cuáles Dios creó a las mujeres tan buenas y bonitas. Pero estoy siempre a favor de celebrar, casi cualquier cosa. Como mi mamá.
Y entiendo que algunas mujeres se ofenden si el día pasa desapercibido más que yo si me regalan flores y chocolates. Los chocolates nunca me ofenden, pero seamos honestos: no somos todas maravillosas y buenas por ser mujeres, por ser hijas o por ser madres. Ni somos todas bonitas. Evitaré entrar en el debate sobre la relatividad de la belleza.
Todos conocemos a muchas viejas feas, pendejas o mala clase. O todas las anteriores. Como conocemos tipos feos, pendejos y mala clase.
Estoy a favor de buscar un mundo más equitativo donde tengamos igualdad de oportunidades en lo esencial. No solo las mujeres. No solo hoy. Pero celebro que se considere deseable esa búsqueda de la equidad.
Y le guste a uno o no, la idea sobre qué es ser una mujer y el imaginario sobre el tipo de mujer que se quiere ser y el que no, tiene una relación directa con la mamá y las mujeres de la familia. Y cuando uno es grande también con las amigas que elije.
Así que sonreiré a las felicitaciones, ignoraré los mensajes sosos y me comeré los chocolates. Y haré una lista de lo que heredé o aprendí de mi mamá sobre ser mujer, sobre quién quiero ser y quién no tanto.
Por supuesto que muchas de estas ideas son prejuiciosas, pero eso también se hereda y estas ideas son mis herencias así que las compartiré sin juzgarlas.
-Que es importante verse bien pero es más importante sentirse bien y por eso el tiempo libre se invierte mejor en aprender o en enseñar algo que en el salón de belleza o en el gimnasio.
-Que la nariz es el marco de una cara y refleja el carácter de una persona.
-Que la proporción entre la cintura estrecha y la cadera amplia es imprescindible para que un cuerpo femenino clasifique dentro de la definición de “buen cuerpo”; una idea que es muy oportuno cultivar en las mujeres costeñas.
-Que la ropa que es muy cortica, apretada o escotada es innecesaria o de mal gusto y no se ajusta a la idea sobre ser mujer que es deseable amplificar.
-La sospecha de que el tiempo invertido en dietas y maquillaje para verse bonita es tiempo que le robaste a leer o a viajar, a hacer deporte o a comer rico, cosas que probablemente sean más importantes porque también están bien rankeadas en la lista de deseos de los hombres y a ellos nos les enseñaron desde niños a sobrevalorar verse siempre lindo para los demás.
-Que es preferible usar una talla más de pantalones que privarse de los postres, pastelitos y panes que trae el día a día.
Heredé también el placer de disentir y la atracción por el sentido del humor.
Feliz día a todas las mujeres, a los hombres no porque los hombres no son tan buenos, tan tiernos ni tan bonitos.
@JuliaLondonoBoz @Juliademiamor