George o nomics

Publicado el

Mano de obra barata, ¿apuesta de ingenuos?

Logistica

Por años gran parte de los países en vía de desarrollo, si bien no lo acepten como una política formal de desarrollo, han funcionado bajo la premisa que sus bajos costos de mano de obra les permitirán competir con productores del primer mundo en relativa tranquilidad, manufacturando productos que no ofrecen mayor valor agregado, también articularse sin traumatismos en tratados de libre comercio, después de todo, por que no creer que compañías multinacionales tomarán la decisión obvia de mover su aparato productivo a la «periferia» con la expectativa de pagar salarios más bajos, aligerar su estructura de costos y ganar participación en sus propios mercados de origen?, asimismo compañías domiciliadas en países que aun no firman estos tratados, caso Brasil, porque no trasladar parte de su aparato productivo a geografías con acceso libre de tributos a mercados desarrollados y cargas salariales bajas?

El caso colombiano presenta síntomas que deberían disparar alarmas y planes claros de acción, una apuesta predominante (formal o no) por ofrecer una estructura de costos laborales barata a cambio de capital, puede no ser suficiente para atraer flujos de inversión en el largo plazo, hay que centrar la atención en la competitividad por otras vías: la innovación, infraestructura y la absorción rápida de nuevas tecnologías, deberían adoptar papeles protagónicos reales (más allá de su reiterada mención en los planes escritos de gobierno) en las agendas de desarrollo.

Alerta 1: Servicios Auxiliares:

Reducir la estructura de costos de un producto manufacturado a la mano de obra puede probar ser un supuesto, por lo menos, traicionero, después de todo la producción industrial responde a unos insumos básicos, y unos costos de conversión que van mucho más allá de los operarios, muchísimos implican reacciones intensivas en energía eléctrica, gas y otros servicios auxiliares, donde cada vez la brecha entre economías emergentes y desarrolladas tiende a ampliarse.

Para examinar solo un ejemplo, pensemos en la energía, los costos del kilovatio en los Estados Unidos son poco menos del 70% de los de Colombia, es decir por cada millón de kilovatios consumidos, asumiendo un precio de 10 ctvs KW/hra, una empresa en los Estados Unidos se ahorra 30,000 dólares respecto a una en Colombia, a cuantos salarios mínimos equivale ese valor….?

Si bien el traslado de infraestructura física de producción es un proceso demandante, el libre acceso a mercados desarrollados, el mayor número de jugadores compitiendo y el acceso a fuentes de financiación lo hacen necesario y también lo facilitan. A una compañía de tradición con una gerencia sólida y relaciones consolidadas con el sector financiero, no le resulta difícil conseguir financiación de largo plazo en condiciones cómodas para planes de reestructuración y reorganización orientados a la generación pronta de valor.

Alerta 2: Logística e infraestructura:

De las más sonadas, entristece que una nación que fue pionera en construcción de vías férreas en terreno montañoso, haya sido incapaz de reactivar sus ferrocarriles, devorados por décadas de malas administraciones plagadas de corrupción, y ahora se vea forzada movilizar la totalidad de sus insumos y productos terminados por carreteras.

Para colmo de males en el año 1538 el buen Gonzalo Jiménez de Quesada tuvo a bien fundar la capital del país en todo el centro de mapa y a 2,600 metros del nivel del mar, (si bien para los siempre optimistas Bogotanos, nos resulte preferible pensar que estamos más cerca de las estrellas); ahora, mas de 470 años después, cerca del 15% de la población reside en Bogotá, más cerca de las estrellas, pero muy lejos de los puertos.

Esta situación se convierte en una pesadilla logística para el empresariado, la decisión entre ubicarse cerca a los puertos o cerca al mercado no es fácil, aun más para los exportadores,  tener gran parte del aparato industrial en el centro del país obliga a mover dos veces los insumos, una vez como materia prima hacia sus plantas y la segunda como producto terminado para embarcarlo, haciéndolos atravesar una red de infraestructura que con cada kilometro recorrido les va robando margen de competitividad.

Alerta 3: Absorción tecnológica:

En adición a los costos reducidos de servicios en otras geografías, la incorporación de nuevas tecnologías menos intensivas en mano de obra y demandantes de menos insumos y servicios, también menoscaba la engañosa ventaja competitiva de la mano de obra barata.

Ya el foro económico mundial en su metodología para elaborar su “ranking” de economías más competitivas, acepta que para países emergentes, más importante que “generar tecnología” es buscar medidas para absorberla con prontitud. La forma más evidente para favorecer esta absorción, es mediante los incentivos tributarios, mismos que en Colombia, se han venido eliminando. En cierto modo la competitividad resulta como víctima del desbalance fiscal, y en lugar de dar la batalla por mecanismos un poco menos populares o mas retadores como la reducción del tamaño del gobierno a la guerra a la corrupción, se elimina de manera acelerada algunos incentivos que pueden estar alimentando la sostenibilidad económica nacional.

Alerta 4: Proteccionismo histórico:

En países como Colombia aún operan monopolios dominados por conglomerados de altísima influencia en los órganos del poder público, muchas veces estas logran condiciones proteccionistas que si bien salvaguardan sus intereses, van en claro detrimento de los de sus clientes, que en ocasiones generan hasta 100 veces más empleos que su monopólico proveedor. Un arancel del 15% para un insumo que solo produce una paquidérmica  compañía localmente, pero que consume un sector de cientos de jugadores, no tiene lógica alguna, no le sirve a nadie, esta situación le impone altísimos requerimientos de competitividad a las empresas que están al final de la cadena, obligadas a lidiar con competidores del exterior y en desventaja para exportar,  la buena noticia es que en juego largo hay desquite, y en el largo plazo ante un eventual desmonte del arancel, quienes tuvieron que hacer esfuerzo (productores finales), contarán con unas estructuras bastante eficientes, mientras el paquidermo protegido tendrá que lidiar con la resaca de años de fiesta a costas de un paternalismo artificial.

En conclusión, estas son solo 4 alertas de cientos que puede haber, pero lo que no se puede hacer es permanecer estáticos, la democracia es hermosa, pero tiene sus defectos, Europa tuvo que aprender a las malas que en los procesos económicos juega tanto el raciocinio de la teoría como el aparato político, si bien es claro que un país como España tiene que aprender a vivir con lo que tiene y no endeudándose a cantaros, qué gobierno se atreverá a asumir el costo de político de años de beneficios y un gobierno sobredimensionado financiado con deuda? Como reaccionará la población?, quién le puede decir de un momento a otro a los empleados públicos en Grecia que lo lógico es que empleados públicos de hecho trabajen? Colombia debe escuchar, seguir de cerca los ejemplos; hay que trabajar en absorber rápidamente las nuevas tecnologías, facilitar su importación, financiación y montaje, un aparato productivo con tecnología de punta está en capacidad temporal de absorber las ineficiencias en infraestructura y servicios (aunque no por siempre).

Si bien se ha repetido hasta el cansancio que la infraestructura debe actualizarse, la generación de electricidad ampliarse y hacerse más eficiente; no se ha avanzado en el tema. La des regulación energética de los 90 hay que revisarla, veamos lo que le pasó al estado de California cuando lo intentó y el por qué Estados Unidos como nación no siguió ese camino, (¿quién dijo Enron…?), y asimismo y lo más difícil, poner fin a los feudos protegidos por gobiernos, jueces y parlamentarios.

Colombia es una economía agradecida, ha soportado años de guerra, evasión, corrupción, retraso y malos manejos, pero hasta cuanto nos aguantara la soga…?

Comentarios