Es el día martes 10 de Diciembre de 2013, son las 9:00 am y frente al Centro Comercial UNISUR del Municipio de Soacha, se ve un grupo de jóvenes con camiseta blanca, que se encuentran y preparan algo con un cierto aire misterioso; se estiran las telas, se preparan las pinturas, el improvisado “konker” de cartón y algunas tizas son el presagio de que algo más grande está por ocurrir. Llegan en pocos minutos varios amigos, se reconocen y se saludan unos a otros, algunos no son conocidos, pero saben que les une el compromiso y amor a la “cultura Hip Hop”, así como las ganas de trabajar unidos, otros más, traen su mascota e incluso hace presencia una“familia Hip Hop”, que con su pequeño bebe de tan solo 9 meses de edad, se convierte en la alegría y símbolo central de la esperanza que les acompaña siempre.
Se ondean algunas banderas de Colombia, y es un megáfono (al mejor estilo Junta de Acción Comunal), el que permite expresar las indicaciones para el desarrollo del ejercicio, si bien se resaltan algunos liderazgos, se evidencia que esta marcha esta en cabeza de todos y cada uno de los presentes. Las y los raperos comandan la elaboración de las consignas y mensajes, los b-boys y b-girls se lanzan al suelo y empiezan la sesión de danza, los escritores elaboran algunas piezas graficas frente a la Objeción de Conciencia y los Derechos Humanos, mientras que los Dj se encargan de agenciar la música y monitorear toda la puesta en escena.
A estas alturas, ya es natural que el ambiente se presente un poco tenso, debido a la resiente destitución (el día anterior) del alcalde Mayor de Bogotá, Gustavo Petro; por tal motivo no hace demora la aparición de un motorizado de civil, el cual se presenta como agente de inteligencia de la policía nacional y pide explicaciones sobre el alcance y objetivo de esta movilización; es uno de los jóvenes del movimiento quien establece dialogo con él, le hace entrega del comunicado de prensa oficial y le expresa la información clara al respecto, aquel personaje toma la información y por medio de su teléfono móvil procede a dar parte de la situación a las autoridades pertinentes. Mientras esto sucede (algo bastante normal en Soacha) un “parche de trabajo”, procede a ingresar a las instalaciones de la Personería Municipal, lugar en el cual radica el documento que contiene el objetivo y demandas que dan sentido a la marcha, ellos y ellas son recibidos sin novedad cumpliendo con su tarea y reincorporándose inmediatamente al grupo general.
Cerca de las 10:00 am, ya se reúnen aproximadamente 100 jóvenes hombres y mujeres, TODOS practicantes de las disciplinas del Break Dance, Graffitti, Rap y Dj, así como del Beat Box y la Producción Musical y Audiovisual, se terminan los graffitis móviles y son los malabares con su fuego natural, los que dan la indicación de avanzar hacia el objetivo central (Alcaldía Municipal). Según los promotores, la idea de esta Marcha Social y Artística, surge como resultado a la falta de apoyo real y permanente por parte de todas las instituciones frente a las diversas expresiones artísticas y comunitarias desarrolladas por los “Hip Hoppers” de Soacha, sin embargo, esto no se queda allí; ya que como lo manifestaron otros participantes, el objetivo superior es re-posicionar el Hip Hop como un interlocutor cultural propositivo y de amplia trayectoria en los asuntos políticos y comunitarios del municipio (Todo esto en clave de la promoción, protección y restitución de los Derechos Humanos). El movimiento Hip Hop Suacha (para sorpresa de muchos, se escribe con U y no con O, asunto identitario, que abordaremos en un próximo articulo), es el resultado de un proceso social de articulación, de los y las “Hip Hoppers” de todo el municipio, es de carácter autónomo y busca el desarrollo de una agenda social y cultural del Hip Hop de carácter autosostenible y en diálogo permanente con todos los actores públicos y privados presentes en el territorio.
Se da continuidad al ejercicio transitando por la autopista sur, y arribando a la carrera séptima (vía principal del municipio), hacen presencia una patrulla y un par de motocicletas de la policía nacional (quienes nuevamente solicitan información sobre el proceso); A continuación se decide girar en la calle 18, donde se establece una protesta simbólica frente al distrito militar número 59 con sede en Soacha (allí se presentaron las pinturas respectivas y se corearon las consignas en contra del servicio militar obligatorio y de la inclusión de la mujer como objetivo militar en el conflicto armado). Finalmente se avanza con calma, alegría y organización hacia la “casa de la cultura”, lugar que fue cerrado abruptamente (con ciertos gestos de miedo) por parte del vigilante y los funcionarios públicos; allí y gracias a esta respuesta institucional, se decide establecer una protesta simbólica frente a los comportamientos de exclusión y desconocimiento de quienes precisamente son los encargados de diseñar e implementar las políticas públicas culturales del municipio.
Es irónico, pero fue gracias a un suboficial de policía, el que logró, se pudiera acceder a las instalaciones de “la casa de la cultura” y radicar el documento soporte de las demandas y propuestas del Movimiento Hip Hop Suacha, así y “gracias a esta reacción es que se demuestra la incompetencia del gobierno municipal para establecer un mínimo de diálogo con los actores sociales que habitan el territorio”, afirman algunos de los presentes (esta actitud institucional fortaleció la dinámica de los marchantes, y permitió que recibieran el apoyo de otros cultores, padres de familia, comerciantes, medios de comunicación y hasta policías).
Finalmente, se avanzó hasta el parque principal, lugar en el cual se hizo un plantón cultural, los Dj pusieron los sonidos, los Mc´s las palabras con ritmo, los Graffiteros se apoderaron del suelo con sus pinturas y los B-Boys y B-girls (sobre todo peques) nos hicieron vibrar el corazón con sus giros y actitudes artísticas. Tras cerca de una hora de espera, hizo presencia el encargado de Juventud de la Secretaria para el Desarrollo Social, aquel que se iba a reunir y “negociar” con un grupo de delegados a puerta cerrada, pero fueron los mismos “Hip Hoppers”, quienes solicitaron hacer la audiencia en público y frente a todos los presentes, se logró hacer entrega del documento y pactar algunos acuerdos frente al camino a seguir en el diálogo sobre la realización del festival de hip hop de Suacha y de otros asuntos como la semana de la juventud, etc.
Siendo las 2 pm y con una leve llovizna, se decide dar por terminado el ejercicio, del cual quedan muchos aprendizajes y aspectos por mejorar, se entiende que la apuesta del movimiento es por sobre todo de carácter autónomo y más allá de los agentes institucionales, pero NO se renuncia a la exigencia de los Derechos Humanos y su cumplimiento por parte de estos mismos actores, además se propone desde el Hip Hop, desarrollar un proceso de veeduría y control social a los recursos públicos destinados y ejecutados en relación a la cultura, el deporte, la educación y a todos los asuntos propios del desarrollo de los y las habitantes de Soacha, finalmente se acordó que se debe desarrollar una reunión mensual con una Mesa de Trabajo Hip Hop, de la cual hagan parte voceros del proceso y delegados de todas las instituciones que trabajan con y por el Hip Hop del municipio de Soacha.
Como dice el dicho “Amanecerá y veremos”, pero lo cierto es que en el municipio de Soacha, se logró demostrar una vez más, que el Hip Hop está y estará interesado por los asuntos públicos y políticos (mas allá de partidos y candidatos) y estará atento a las decisiones que se tomen e influyan en lo que para muchos es una moda y para la mayoría un estilo de vida.
Cordialmente.
Nicolás López Infante (A.K.A Rap Metodológico)
Yamid Cortez
KallesKapital Magazine
Medios Hip Hop