Horas antes de la inauguración del Mundial, los brasileños regresaron a las calles, esta vez en Sao Paulo, para protestar por el alto costo de la realización de la Copa que, presuntamente, está vinculado a corrupción.
Con 150 mil uniformados se estima que éste es uno de los Mundiales más custodiados de la historia.
Además de brasileños, las protestas han estado apoyadas por miembros de ATTAC, un grupo de activismo francés.
FOTOS: EFE Y AFP