Por ACNUR
Con el propósito de dar alojamiento a familias que han huido de sus países mientras esperan una resolución a sus solicitudes de reconocimiento de la condición de refugiado por parte de las autoridades mexicanas, se inauguró en Tapachula, Mexico, el albergue “Tres Ángeles”, con el apoyo del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR). La construcción de este albergue, iniciativa de la señora Olga Sánchez, fundadora del Albergue “Jesús el Buen Pastor”, surgió ante la necesidad de contar con un espacio adecuado para recibir y alojar por períodos más prolongados a grupos familiares que huyen de la violencia, perfil cada vez más frecuente entre la población que solicita la condición de refugiado en México provenientes principalmente de la región conocida como Triángulo Norte de Centroamérica (Salvador, Honduras y Guatemala).
“El albergue Tres Ángeles no es únicamente un espacio físico para alimentarse y descansar. Es además una oportunidad para que la familias solicitantes de la condición de refugiado tomen fuerzas y recuperen cierta normalidad, que les permita prepararse para reiniciar nuevamente sus vidas en México mientras esperan la resolución a su solicitud”, comentó Rafael Zavala, Jefe de la Oficina del ACNUR en Tapachula, Chiapas. El albergue podrá alojar en esta primera etapa hasta 5 familias por un periodo de 45 días hábiles, tiempo establecido por la Ley sobre Refugiados, Protección Complementaria y Asilo Político para dar respuesta a las solicitudes de reconocimiento de la condición de refugiado. Doña Olga Sánchez continúa en la búsqueda de fondos para llevar a cabo la segunda etapa del albergue, que consistirá en la construcción de más módulos para recibir a un mayor número de familias solicitantes de la condición de refugiado.
En los últimos años, se ha incrementado el número de personas que solicitan la condición de refugiado a la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR). En el 2014, el número de personas que solicitaron protección internacional se incrementó en casi un 65% en comparación con las solicitudes recibidas en 2013. La violencia criminal y la persecución son algunas de las principales causas que provocan la salida de personas, incluyendo niños, niñas, adolescentes e incluso familias de Honduras, El Salvador y Guatemala, muchas de ellas con necesidad de protección como refugiadas.
Al mismo tiempo en Honduras, en San Pedro de Sula, se inauguraron las obras de mejoramiento de las condiciones de recepción del Centro de Recepción, Referencia y Albergue de la Niñez Migrante El Edén. Con esta obra, se busca la creación de espacios saludables y amigables para la atención de niños, niñas y adolescentes, considerando su edad, sexo y situaciones particulares que puedan presentarse en la recepción, tras su retorno al país. La intervención fue el resultado de un esfuerzo conjunto de coordinación entre Gobierno, Sistema de las Naciones Unidas y Organizaciones de Sociedad Civil que se dedican a la atención de niños, niñas y adolescentes.
De acuerdo con las cifras del Centro de Información del Sector Social de Honduras (CENISS), un total de 13.059 niños y niñas fueron retornados al país desde que se inició el proceso migratorio hasta el mes de junio del 2015 y durante este mes han ingresado 3.517 niños. “Los movimientos migratorios, ya sea que se produzcan de manera regular o irregular, comprenden una variedad de perfiles de personas, entre quienes figuran niños y niñas que tienen un riesgo relacionado con las situación de violencia que se vive en el país. El Gobierno hondureño debe garantizar la protección de su derecho a la vida, libertad, seguridad e integridad física”, dijo el Representante Regional del ACNUR para América Central, Cuba y México, Fernando Protti Alvarado.
El estudio del ACNUR titulado “Arrancados de Raíz”, realizado en la frontera de México y Guatemala, encontró que el 48.6% de los menores de edad provenientes de El Salvador, Guatemala y Honduras que fueron entrevistados podrían estar en necesidad de protección internacional. Por otro lado, el estudio encontró que de los niños y niñas entrevistados, los nacionales de Honduras son quienes en mayor medida están huyendo de la violencia e inseguridad en sus países de origen, con un 59.5%.
*Otra entrega de la colaboración entre el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y El Meridiano 82.