Estamos a punto de iniciar en nuestro continente una de la máxima fiesta del deporte más popular del mundo: la Copa América de fútbol. Un momento que esperamos con mucha ilusión, especialmente quienes estuvimos en instancias avanzadas con nuestra selección en el mundial de Brasil y tenemos sed de revancha.
Mi pregunta es: ¿aumentará o disminuirá la frecuencia sexual durante estas semanas de competencia?
Primero que nada se me viene a la mente la hipótesis de que las mujeres pueden descansar de las píldoras anticonceptivas, no será necesario gastar en condones o hacer cálculos matemáticos acerca de la fecha de ovulación. Parece que el fútbol se lleva toda la atención no solo de ellos, sino de ellas que cada vez más participan como espectadoras de este deporte -por el partido en sí mismo o para deleitar el ojo con los jugadores más guapos-. En particular los días de partidos importantes –que serán muchos- se caracterizan por las reuniones sociales desde temprano, la comida en abundancia, altas cantidades de alcohol y mucha excitación mental. Difícilmente habrá posibilidad de un “match” entre las sábanas después de semejante bombardeo al cuerpo.
Pero también imagino otros escenarios. La misma euforia al alentar a tu selección puede ser un elemento de unión emocional en la pareja. Esa excitación mental también se traslada en algunos casos a lo sexual. Y la alegría por el triunfo dejará una sensación positiva que a veces se corona en un encuentro íntimo.
Pienso que todo depende de cada pareja. Para algunas, el mundial es una excelente excusa para desconectarse sin hacerse ningún tipo de planteo al respecto. Para otras, es una oportunidad de acercamiento, de compartir, de rozarse mediante caricias o abrazos de gol, y así provocar al deseo.
Desde una mirada positiva, esta competencia te da la posibilidad de algunos interesantes juegos eróticos: apostar acerca del resultado de un partido, y el que gana elige el “premio”, por ejemplo una fantasía a cumplir; meterse en la cama cada uno con la camiseta de dos equipos opuestos, y así jugar a ver quién mete más goles; desafiar a ella a ver si logra con ropa sexy o poses sensuales distraer la atención de él durante el partido; hacer masajes en la espalda y otras partes del cuerpo con un balón de fútbol; tener un “rapidito” en algún corte del encuentro.
Espero entonces que en esta Copa América gane tu selección, y si no es así, que al menos lo aproveches también como una buena opción para enriquecer tu vida erótica. Pensándolo bien, no dejes de tomar las píldoras, de comprar condones o de hacer cálculos. Esto se puede poner muy excitante.
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