¡No te quites la vida, Matador!

• “Para el Sabio no existe la riqueza. Para el Virtuoso no existe el poder. Y para el Poderoso no existen ni el Sabio ni el Virtuoso”: Roberto Fontanarrosa, humorista gráfico argentino (1944-2007)

No le perdonan que sea un generador de opinión con casi quinientos mil seguidores en Twitter y un millón doscientos mil en Facebook. Es decir, Matador tiene más seguidores que lectores tienen algunos medios de comunicación en este país. Su virtuosismo está en la carga demoledora de su pluma y su sabiduría en la interpretación diaria del acontecer nacional valiéndose de la fauna política. En el momento actual, ningún caricaturista despierta en Colombia tantas pasiones como él. Sus trazos causan urticaria. Como artista nació dotado para la sátira y la utiliza para interpretar la realidad a su manera.

• “La caricatura tiene el poder mágico de producir, con un rasgo o con una leyenda, un efecto más convincente que el de cualquier silogismo y un resultado más devastador que el de cualquier diatriba escrita (…) Su efecto es milagroso, instantáneo como el de un disparo”: Álvaro Gómez Hurtado, político, periodista y pensador colombiano, asesinado el 2 de noviembre de 1995. (1)

¿Les pareció poco sacarlo de El Tiempo y dejarlo sin con qué aportar en su casa?  Cero y van dos en cosa de tres meses: ¡Abracadabra!: Luego de diez años, la Fiscalía decide reabrir el proceso por violencia intrafamiliar. La noticia la publicó el mismo periódico que lo pateó.

¿Hay acaso acoso judicial contra el artista, o la intención de imponer una censura moralizante por una mala conducta ya reparada, o se busca afectar el buen nombre de Julio Cesar González y el de su marca personal?

Desde que lo echaron de ese periódico, no ha dejado de dibujar. En sus últimas caricaturas, a propósito del sonado caso Laura Sarabia-Armando Benedetti, ha cuestionado las actuaciones del fiscal general de la nación, ha recordado las chuzadas de la era Uribe, ha criticado a los medios y, por otro lado, tras las  declaraciones de Mancuso ante la JEP, ha comentado la visita del fiscal de la Corte Penal Internacional, CPI, Karim Khan.

• “Empezando por Moisés todos los grandes líderes de la historia sabían que era necesario aplastar por completo al enemigo al que temían. (…) Si se deja encendida una sola brasa, por muy débil que sea, siempre se corre el riesgo de que vuelva a desencadenarse un incendio”. (“Las 48 leyes del poder”, Página 153).

Reabrir su caso parece más una retorcida estrategia para amedrentar y ponerle freno a su producción intelectual,  como si entre nosotros se moviera una versión de carne y hueso de Boogie el aceitoso, el oscuro personaje creado por Roberto Fontanarrosa: aquel acataba entre muchas otras órdenes la de perseguir periodistas por orden de algún político.

La periodista Cecilia Orozco (directora de Noticias Uno y columnista de El Espectador) escribió lo siguiente en su cuenta de Twitter: “Barbosa actúa como policía político: reabre investg contra Matador porque lo pide el enemigo del caricaturista, que, a su vez, es amigo de Uribe a quien la Fisc. favorece”. (Sic)

Me pregunto cuánto falta para que lo metan preso por un abuso del que ya fue perdonado por la víctima de sus agravios, su esposa, con quien sigue teniendo un hogar, porque esto que les pasó pasa hasta en las mejores familias, y cuando hay arrepentimiento sincero, y cesan las ofensas, las parejas deciden continuar su vida en común.  No es la primera ni será la última. Y el hombre es ante todo un ser de carne y hueso, con virtudes y defectos, como todos nosotros.

Si lo que buscan es encerrarlo, esa sería la manera más rápida de quitarle sus derechos, empezando por el derecho a opinar a través de las redes sociales, la única tribuna que le queda para expresarse al no tener quién le publique.

Los lectores de prensa lo extrañan, los he leído en las redes sociales. Laureado con varios premios de periodismo, ya se ganó su puesto en la historia de la caricatura política colombiana para desazón de sus detractores. Sus trazos son trozos y destrozos de la realidad nacional, tan efímera ella como la vida misma, más en un país como Colombia que no terminaba de celebrar una buena noticia (encontraron con vida a los niños perdidos en la selva del Guaviare), cuando nos dañan el día con una mala: el suicidio de un coronel implicado en el escándalo de las chuzadas.

A la mañana siguiente, el propio Matador nos confesaba, mediante una caricatura, que ha sentido el deseo de quitarse la vida por todo el escarnio público al que lo han sometido. Enfermo está un país que empuja a la gente al suicidio.  ¡No te quites la vida, Julio Cesar! En los momentos de más oscuridad, vale la pena escuchar a la  escritora Clarice Lispector: “Tenemos el terrible deber de llegar hasta el final”.

Sé que si pudieran, lo cegarían (como los filisteos a Sansón) para que no pueda observar la realidad  y plasmarla con su visión crítica sobre un pedazo de papel. Si pudieran, lo calcinarían en la hoguera para darle un escarmiento a los demás: con los poderosos no se metan. Si pudieran, le cortarían las manos, pasándolas por la censura de la guillotina oficial, que curiosamente no proviene de un gobierno, sino de una especie de dictadura en la sombra.  Si pudieran, lo crucificarían y al final le pondrían en la boca un pedazo de tela entrapada en vinagre. Si pudieran, lo lanzarían  a la fosa de los leones, como hicieron con el profeta Daniel.

• “Mi Dios envió su ángel, el cual cerró la boca de los leones, para que no me hiciesen daño, porque ante él fui hallado inocente; y aun delante de ti, oh rey, yo no he hecho nada malo. ²³ Entonces se alegró el rey en gran manera a causa de él, y mandó sacar a Daniel del foso…”. (Libro de Daniel)

¿Quién intercede en favor de los caricaturistas? La Fundación para la Libertad de Prensa, FLIP, salió en defensa de Matador en 2018 cuando un seguidor del partido Centro Democrático interpuso una tutela por satirizar al, en ese entonces, presidente Iván Duque. La FLIP expuso varios argumentos apoyándose en la jurisprudencia colombiana que protege la libertad de expresión y en los estándares de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que respaldan la libre opinión.

Dijo la FLIP: “Asistiremos al día del fin de la caricatura el día en que los jueces concedan las pretensiones de censura de aquellos que se sientan agraviados por la parodia, la broma, la ridiculización o la exageración en una caricatura”.

Ojalá la FLIP se pronuncie sobre este nuevo caso. Es raro que tampoco haya habido una declaración de otros caricaturistas. En tiempos tan convulsos qué importante sería sentar un precedente. Si la intención es la de desterrarlo de las redes sociales por sus posiciones políticas, se estaría configurando una forma desconocida del exilio. El peligro de una posible persecución es que en el futuro condenen a cualquier artista al ostracismo por los pecados del pasado.

•  “…nadie puede estar a salvo frente a un caricaturista que conoce tan bien a los seres humanos, que conoce inclusive el espacio reservado a su propio Ángel de la Guarda”:  Gabriel García Márquez. (2)

(Citas 1 y 2: tomadas del libro “Osuna de frente”, Biblioteca de El Espectador y  El Ancora Editores)