Catrecillo

Publicado el Ana Cristina Vélez

Cómo bajar de peso sin moverse de la silla

Parece imposible, pero es cierto. La clave está en hacer algo muy difícil para la mente, algo que produzca un nivel alto de estrés, suficiente como para alterar el ritmo cardíaco, aumentándolo, algo que obligue al cuerpo a producir más energía y a consumir más azúcar y más oxígeno que el básico.

Y no se está hablando teóricamente, pues jugar ajedrez a un alto nivel produce todo esto. Un jugador de ajedrez puede quemar hasta 6,000 calorías en un día de torneo. Casi tres veces lo que quema una persona en un día normal. La tasa de respiración se triplica durante la competencia, la presión arterial se eleva y aumentan las contracciones musculares. En 2018, se midieron las calorías que el maestro ruso Mikhail Antipov, de 21 años, había quemado sentado jugando al ajedrez; nada menos que 560 calorías en dos horas. Lo mismo que Roger Federer quema jugando tenis durante una hora. En promedio, los jugadores mundiales de ajedrez pierden alrededor de 10-12 libras en el transcurso de un torneo de 10 días.

Magnus Carlsen. Tomado de Wikipedia

En 1984 hubo que suspender el Campeonato Mundial de Ajedrez, después de 48 juegos, porque el campeón defensor del título, Anatoly Karpov, había perdido 22 libras. En 2004, el ganador Rustam Kasimdzhanov se retiró en el sexto juego del campeonato mundial, porque había perdido 17 libras. El maestro Caruana baja en un torneo de 10 días un promedio 15 libras, de 135 libras que pesa él baja a 120.

Los jugadores de ajedrez de hoy siguen dietas especiales, hacen ejercicio físico y cuidan las horas de sueño para mejorar su estado físico y mental. Buscan aumentar el suministro de oxígeno al cerebro durante los torneos, evitar accidentes relacionados con el azúcar y poner el cerebro realmente a descansar cuando no están compitiendo.

El primer gran maestro de la India, Viswanathan Anand, hace dos horas de ejercicio cardiovascular para dormir relajado y dejar de pensar en el ajedrez; el maestro Kasimdzhanov solo bebe té durante los torneos y juega tenis y baloncesto todos los días. Chirila hace al menos una hora de ejercicio cardiovascular y una hora de pesas, para desarrollar masa muscular antes de los torneos. El actual campeón mundial Magnus Carlsen dejó de tomar jugo de naranja durante los torneos cuando descubrió que su organismo no podía extraer el azúcar con la velocidad que necesitaba, y lo cambió por leche chocolatada. Carlsen se somete a una rutina de ejercicios que incluye correr, esquiar, jugar futbol y hacer yoga como preparación para los torneos. Además, durante estos, mastica chicle para tratar de aumentar la función cerebral sin perder energía, y también golpea sus piernas rítmicamente para mantener su cerebro y cuerpo en estado de alerta.

Carlsen incluso ha estudiado la postura para jugar. Está convencido de que estirar el cuello hacia adelante 30 grados aumenta el estrés del cuello en casi 60 libras. Cree que esto no solo daña el cuello sino también los músculos de la espalda y desmejora la respiración. Por eso, al jugar, Carlsen apoya su espalda baja contra la silla, manteniendo su curva natural; separa un poco las  rodillas y asienta firmemente sus pies en el suelo. Inclina su cuerpo completo hacia adelante en un ángulo de aproximadamente 75 grados. Dicen los que saben que Magnus es capaz de ganar juegos en la quinta hora del juego, cuando los oponentes están agotados.

El 9 de septiembre de este año empezaron en Siberia los torneos eliminatorios para la Copa del Mundo. Juegan 128 jugadores de 47 países. Los finalistas irán al Torneo de Candidatos para el título mundial en el 2020, a retar a Magnus Carlsen. El gran maestro Ding Liren, de China, es uno de los favoritos para finalista. El participante más joven tiene 14 años, se llama Nodirbek Abdusattorov. Estará invitado el niño prodigio indio Nihal Sarin, con título de Gran Maestro, logrado el año pasado, a los 15 años de edad. El jugador más viejo es el egipcio Essam El-Gindy de 53 años.

¿ Difícil de creer? fuente: An Intense game of chess

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