Bajolamanga.co

Publicado el Bajolamanga

Félix Neftelio: ¿El gerente santo de Nechí?

Por: Sergio Mesa 

El municipio de Nechí, en el Bajo Cauca antioqueño, casi siempre es noticia por las inundaciones y el rompimiento del dique por donde va la vía, cruzando el río Cauca, el cual está recién inaugurado por la Gobernación de Antioquia y el DAPARD, a través de ejecuciones de Colombia Humanitaria, por la ola invernal de hace unos años.

Pero no solamente por esas imágenes de damnificados es conocido ese municipio, sino también por el actual gerente de la E.S.E. Hospital La Misericordia, Félix Neftelio Santos Pestaña, quien ha protagonizado serios escándalos, siendo investigado por la Contraloría General de Antioquia y la Procuraduría Provincial de Yarumal, en donde siempre sale exonerado de toda culpa, vaya uno a saber por qué, estando las pruebas y existiendo testimonios de cómo se maneja la contratación de la entidad hospitalaria, según algunas fuentes consultadas.

A medida que avanza uno, en el análisis de la contratación, se da cuenta de la ceguera de los entes de control. El contratista que suministra la papelería a la E.S.E. Hospital tiene su domicilio en Ayapel (Córdoba), ni siquiera en Caucasia que es más cerca. Su nombre es Jorge Jofis Blel Naizir, propietario de la papelería Donde Jorge Blel. A este contratista le han comprado material de papelería suficiente para varios años, siendo un hospital de Nivel I, como puede verse en la 0063 (1/04/2013) por valor de $10.206.840. Y qué tal la perla: una papelería vendiendo material hospitalario por valor de $2.746.880 (Factura 062 – 8/03/2013) y un aire acondicionado por valor de $2.494.000 (Factura 065 – 22/06/2013).

Una fuente consultada me mencionó el Contrato 281-2012, suscrito por el señor Blel Naizir el 12 de noviembre de 2012, por valor de $66.228.895, para suministrar papelería para las diferentes secciones del hospital. Y por qué precisamente terminando el año fiscal. ¿No podrían haber esperado que comenzara el año nuevo?

Existen otros contratos los cuales la Contraloría General de Antioquia debería entrar a revisar, porque según fuentes no fueron suscritos por los contratistas mencionados o no tienen la experiencia para ejecutarlos. El Contrato 035-2013 por valor de $11.500.000, según Cindy Marcela Villamizar Zambrano, quien aparece como contratista, jamás lo firmó ni ha recibido los pagos. Y el Contrato 028-2013 por valor fiscal de $3.000.000, firmado con la Fundación Sol-Luna y Ocaso, además de no tener la experiencia para realizar la actualización del Plan de Gestión Integral de Residuos Hospitalarios, no se encuentra firmado en el original por la representante Carmen María Marzola Borja. Y la auditoría 2014 de la CGA pasó de largo. Ni un hallazgo fiscal.

El alcalde de Nechí (2012-2015), Eduardo Cabrera Urbiña, hizo gestiones ante la Gobernación de Antioquia para la cofinanciación de los diseños para la construcción de la nueva infraestructura del hospital La Misericordia, aportando la Dirección Seccional de Salud de Antioquia (DSSA) $150.000.000 y el municipio $250.000.000, para un total de $400.000.000. “Por recomendación de la DSSA la E.S.E. debía contratar, no el municipio ni el departamento”, declaró Cabrera a un medio de comunicación. La firma D.C.H. Diseño y Construcción Hospitalaria S.A.S., representada por John Esteban Gómez Taborda, fueron los seleccionados para hacer los diseños, los cuales, posteriormente, fueron revisados por el Fondo de Adaptación y el DAPARD, quienes los rechazaron por no cumplir con los criterios estructurales, lo que palabras técnicas obtuvo una “validación negativa”.

La plata se perdió. Se echaron a la borda $399.999.983 del Contrato de Prestación de Servicios 282-11-2012, que son dineros públicos. Algunas fuentes de la Gobernación de Antioquia han manifestado su preocupación por tal detrimento patrimonial, porque en “Antioquia no se pierde un peso”.

¿Y los entes de control qué dicen y qué acciones han tomado ante estos hechos?

El Personero de Nechí tomó acciones y mediante providencia del 19 de diciembre de 2013 prorrogó una suspensión, que ya le había sido impuesta al gerente Félix Neftelio Santos Pestaña, por el término de tres (3) meses, investigado dentro del proceso IUS-2013-276-803, por “celebrar contratos sin el lleno de los requisitos legales… lo que significa que la suspensión está relacionada con el 5° requisito en el artículo 157 del CUD”, se lee en la parte resolutiva del fallo confirmatorio de la Procuraduría Regional de Antioquia. Quién sabe a qué santo se encomendó el gerente Santos Pestaña, pero logró mediante una Acción de Tutela que una jueza revocara la suspensión. Siguió rampante. A él sí le sirven las velas para los santos.

Como si fuera poco la Contraloría General de Antioquia, el ente fiscalizador de los recursos públicos del departamento, inició investigación por responsabilidad fiscal contra Félix Neftelio, a quien exoneró de toda falta, según puede leerse en el borrador del Auto 541 de la CGA, firmado por Santiago Ortega Mateos, quien decidió “archivar el Proceso de Responsabilidad Fiscal numero 117 de 104 (sic)”. Para ellos es normal que se pierdan $399.999.983 pesos. ¿Y qué dice la Contralora General? ¿Qué pasa por la cabeza de los entes de control para exonerar a alguien que jugó con los dineros públicos como si fuera su plata de bolsillo? De nuevo Santos Pestaña se salió con la suya.

Por la falta de mantenimiento en la infraestructura de la E.S.E. Hospital La Misericordia la DSSA, mediante resolución del 27 de junio de 2012, multó a la entidad por un monto de 120 smlmv, algo así como $73.956.000, so pena de cerrar la institución prestadora de salud por incumplir el Decreto 1011 de 2006: Por el cual se establece el Sistema Obligatorio de Garantía de Calidad de la Atención de Salud del Sistema General de Seguridad Social en Salud”.

En unas imágenes que conocí hace unos días puede verse el deterioro de la infraestructura hospitalaria, pese a que se han invertido millones de pesos en contratos para mantenimiento. De acuerdo al estado de la planta física y a que los contratos ejecutados en mantenimiento no han cumplido su cometido, es posible que la DSSA tome acciones. ¿Y qué dice el gerente Santos Pestaña?

Y ni hablar de las investigaciones disciplinarias, porque están viciadas. En la E.S.E. La Misericordia trabaja el contratista Carlos Alberto Hoyos Tejada, quien es hijo del secretario de la Procuraduría Provincial de Yarumal, Sigifredo Hoyos Jiménez, la misma que ejerce control disciplinario contra el gerente Santos Pestaña. Es urgente el control preferente de la Procuraduría Regional de Antioquia para que actúen ante tanta ramplonería.

¿Hasta cuándo debe soportar la población nechiana las burlas y la corrupción de un foráneo de Vigía del Fuerte, que estuvo como gerente del hospital de Caracolí, y de donde no salió muy bien? Si existe la justicia terrenal los entes de control imparciales deben actuar. No deben aguantar una burla más. Y los funcionarios públicos de los entes de control deben impartir justicia, no servir de cómplices.

 

Esta y otras columnas podrá leerlas en www.bajolamanga.co (@bajo_lamanga)

Comentarios