La realidad para dummies

Publicado el Nicolás Acosta

Mi voto es por Gina Parody

Si hasta el día de hoy usted iba a votar por Peñalosa “para que no quede Petro”, pues el mejor negocio que puede hacer ahora es votar por Gina. Tal como lo indicaba la tendencia y la lógica, Gina pasó a Peñalosa y sigue imparable acercándose a Petro. Pero como una de las cosas que más me enferma es que las personas voten a regañadientes para evitar “el mal mayor”, quiero compartir con usted las razones que decidieron mi voto por Gina Parody hace más de 3 meses, a ver si lo logro convencer de que es la mejor opción.

Voto por Gina, en primer lugar, porque es transparente. Bogotá no aguanta un sólo robo más. O llega alguien que sea capaz no solamente de no robar sino de no dejar que roben, o esto deja de funcionar definitivamente. Gina, primero, no va a robar porque no necesita y, segundo, porque es lo suficientemente ética pero, además, tiene el carácter para enfrentársele al que venga. Se le paró a los paramilitares cuando fueron al Congreso, se le paró a Uribe cuando se enloqueció con el poder, se le paró a todo un Congreso cuando defendió medidas como la silla vacía para evitar la infiltración de paramilitares en la política y sé que será capaz de parársele a cuanto contratista, concejal o grupo de interés llegue a pedirle cacao. Esa tranquilidad no me la dan, por ejemplo, los aliados de Peñalosa.

Voto por Gina, en segundo lugar, porque tiene el programa más aterrizado, estudiado y acertado de la contienda. Y no lo digo sólo yo: lo dijeron expertos en cada campo en la revista Dinero y una gran cantidad de reconocidos columnistas como Guillermo Perry, María Isabel Rueda o José Fernando Isaza. Sus propuestas en seguridad, educación, movilidad y competitividad son un hit y, lo más importante, el programa tiene un elemento clave para Bogotá: un norte. El programa de Gina está anidado y tiene objetivos claros, un modelo de ciudad y busca un lugar común: generar crecimiento económico en Bogotá para lograr igualdad en el acceso a las oportunidades. Esa misma confianza no me la da, por ejemplo, el programa de Gustavo Petro, que parece improvisado, sin claridad en cuanto a cómo se van a lograr las cosas y hacia donde quiere llevar a la ciudad. Y es que, el problema con los programas en los que no se sabe qué se quiere hacer o cómo se quiere hacer es que suelen resultar en mandatos llenos de improvisaciones y excusas, como el de Moreno.

Voto por Parody, en tercer lugar, por su capacidad de formar buenos equipos, de exigir y de administrar. La primera cualidad de un buen administrador es saber con claridad qué sabe hacer muy bien y qué no, para encontrar la asesoría experta adecuada. Para hacer su programa, Gina se asesoró de los mejores con humildad, sin pretender sabérselas todas y con el cuidado de contrastar todo con su conocimiento sobre Bogotá. De igual forma, se encargó de formar un equipo de colaboradores cercanos supremamente eficiente al que le sabe exigir y sacar resultados. Por cosas de la vida, he tenido la oportunidad de conocer a varios de ellos y puedo decir que sí hay con qué. Hoy, gracias a esa humildad y efectividad, Gina es quien mas sabe de la ciudad, de sus problemas y de los mecanismos para solucionarlos. ¿No me cree? Lo invito a ver los debates de hoy en CityTv a las 9pm y de mañana a las 8pm por CMI.

Por último, voto por Gina por que creo que le llegó el momento a las mujeres preparadas como ella. Aunque siento admitirlo, las mujeres tienen más tacto que nosotros los hombres, son mas estratégicas y serenas a la hora de tomar decisiones y, si hay preparación de por medio, son capaces de manejar grandes cosas con más efectividad e inteligencia. Como me dijo un taxista esta semana al explicarme su voto por Gina “es que hermano, no nos digamos mentiras: las mujeres gobiernan con elegancia”.

Así, entonces, si de algo le importa mi opinión le recomiendo que vote por Gina. Bogotá está a 4 años de volverse completamente inviable y, a no ser que empecemos a hacer las cosas distinto, no podemos esperar que se generen resultados diferentes. En estas elecciones tenemos la opción de reelegir al Polo o de sacar a la ciudad adelante. No se deje engañar o endulzar el oído por buenos discursos. Bogotá necesita preparación, buenos equipos, carácter, capacidad y, sobre todo, excelentes soluciones. Escojamos bien.

Twitter: @nicolasacosta33

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