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Publicado el Bajolamanga

Cinismo

Hay personas que son así. Retorcidas. Se escudan en principios que les da risa de sólo mencionarlos para convencer a incautos que son felices de decir que son apolíticos. Dios los hace y ellos se juntan. Unos pagan por la peca y otros pecan por la paga. Eventualmente llegan al poder de cualquier manera y terminan por gobernar de cualquier manera.

Esta no es una columna sólo sobre los corruptos; es una columna sobre los que también son cínicos.

Jueves 3 de septiembre. 18:30 hrs. Teleantioquia. 4 candidatos decentes y Luis Pérez Gutiérrez debaten sus propuestas para ser Gobernador de Antioquia. En un momento dado, el candidato experto en abrazos incómodos y visitas a la cárcel sale con una propuesta que si no fuera porque la dice él sería hasta respetable; busca la cámara, hace una pausa y mirando con sus ojos azules (que son una prueba de que a Dios le gusta confundir a sus feligreses) dice: ‘Recuperaré el ferrocarril de Antioquia. Ya hablé con Simón Gaviria’. 10 palabras que, inclusive dichas en Colombia, le pesan como una losa a don Luis y a sus amigos don expresidente César y su hijo don director de planeación nacional Simón. Ridiculez por parte de uno; participación en política de un mediocre hijo que es funcionario público por parte de otro.

Pero son sólo palabras vacías. El 26 de octubre, si Luis Pérez es electo gobernador, cuando las promesas grandilocuentes ya no tengan función, no habrá amistad con Simoncito Gaviria de la cual regodearse, ni planes de ferrocarril sobre los cuales cimentar el futuro de Antioquia. Luis Pérez ha abusado de la palabra como lo hace un extranjero que apenas balbucea español. Sus propuestas sólo se entienden si se reconoce a un populista en toda regla. Luispe ya ha gobernado, y en ese momento sus planes estrafalarios terminaron convertidos en un chiste de mal gusto con cargo al erario público: desde la compra de vajillas multimillonarias y de computadores inservibles, pasando por la incapacidad de dejarle a su sucesor suficiente dinero para pagar el primer mes de nómina. Luispe sabe que nos está mintiendo pero nos confunde. No tiene un carisma especial, ni es muy elocuente ni tampoco políticamente sagaz; pero tiene dinero y contactos mal habidos, y usa su dinero y sus contactos para permanecer vigente. Tanto así que hace 25 años pese a sus promesas tramposas aún lo está.

El político corrupto es el único ladrón que es escogido por sus víctimas. La política tiene algo de  macabra. Pero en las manos (aunque sobre todo en las cabezas) de los antioqueños está la posibilidad de mantener o no otros 4 años vigente a Luispe. El dinero y los contactos se acaban eventualmente cuando las derrotas son costosas.

PD. Colegas de Luispe en el sentido del cinismo hay en todos los partidos. Inclusive en aquellos que le hacen oposición. Se necesita sindéresis para reconocerlos, suelen camuflarse en medio de gente decente. Esos son los más asquerosos. Merecerán una columna más adelante.

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