El Cuento

Publicado el ricardogonduq

¿Qué hacía un youtuber en la Feria del Libro?

Esa pregunta me la hicieron por lo menos cinco personas el fin de semana que pasó. Unos padres de familia, otros jóvenes que no pueden creer lo que pasó. La suspensión en la venta de boletas en Corferias después del mediodía del sábado fue por cuenta de la cantidad de gente que fue a ver a Germán Garmendia, un nombre que hasta ahora escucho, pero que siguen en YouTube unos 27 millones de suscriptores. ¡27 millones! ¿Y los ‘booktubers’ dónde quedan? german1

Por: Ricardo González Duque

En Twitter: @RicardoGonDuq

La respuesta a la pregunta parece simple, el creador del canal de YouTube ‘Hola Soy Germán’ presentó en la Feria del Libro de Bogotá su obra “Chupa el perro”, en la que compiló muchos de los consejos que les da a adolescentes que siguen religiosamente sus nuevos videos cada semana. Lo que hace unos años se veía como un fenómeno del mundo virtual, empieza a ser una realidad y los primeros en darse cuenta son los padres de familia. Pero el asunto va más allá.

Uno de esos padres que vivió las largas filas en Corferias para ganarse la firma de Garmendia en la primera página del libro que promete responderles dudas a los adolescentes, me dijo que cuando a su hijo le preguntan “¿qué quiere ser cuando sea grande?” Él responde: “Un youtuber de videojuegos”. Para los que no entienden todavía el tema, lo que hace por ejemplo un crítico gastronómico es dedicarse a comer y escribir en un periódico o una revista sobre eso. En este caso, lo que quisiera hacer este niño es dedicarse a probar videojuegos y después coger una cámara de video para grabarse hablando de esos juegos, subirlo a YouTube y esperar millones de visitas.

Pero además, muy seguramente él dice lo que quiere ser porque con tan poca edad ya debe haber escuchado de las dimensiones de este que se está convirtiendo en un negocio gigante. Aunque Germán es el youtuber hispanohablante con más seguidores en el mundo, con ingresos de algo más de 2 millones de dólares al año (¡16 millones de pesos al día!) está muy lejos del top 10 de los más ricos del mundo. La lista la encabeza el sueco Felix Kjelberg, mejor conocido como PewDiePie, quien gana 12 millones de dólares al año (¡98 millones de pesos al día!) por comentar con algo de humor sobre videojuegos. Ahí está la razón de porqué el hijo de mi compañero de trabajo quiere hacer esto en su vida.

Los youtuber pueden sin embargo hablar de lo que quieran, no tiene que ser de un tema en especial. Pueden dedicarse incluso a hacerle una oda a lo insulso, a lo estúpido que fue su día, a sus dilemas de adolescentes y a los problemas que solo les importan a ellos. Y van a tener éxito.

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Me puse a la tarea de ver algunos de los videos de Germán, pero me pudo la pereza, la falta de interés. Claro que saca alguna que otra risa, lo mismo que en mi época causaban los stand up comedy, pero no pasó de ahí y de la admiración a las buenas técnicas de edición que tienen. Por eso me debato en la idea de que no creo que leyendo su libro, algo en mi vida o la de sus adolescentes fanáticos, vaya a cambiar. Aunque por algo se empieza.

Eso es lo que cree otra de las defensoras de la presencia de los youtubers en la Feria del Libro este año. Aunque no es una madre de familia, ella recuerda que cuando estaba pequeña su mamá le compraba los libros de tiras cómicas, que aunque traían más dibujos que texto, empezó a crear en ella un interés por la lectura, que hoy ya es un hábito. Por eso, le da la razón a un trino que leí que decía que era mejor tener a unos jóvenes haciendo fila para comprar un libro así fuera éste, que para un concierto de reggaetón.

Según la última gran encuesta que tenemos disponible del DANE sobre la lectura de los colombianos, el 83 por ciento leemos entre uno y cinco libros al año. Sólo un 9 por ciento dice haber leído más de diez, lo que según se han explicado en los ministerios de Cultura y Educación, sin encontrar una verdadera solución, es que a los jóvenes hay que seducirlos y no obligarlos a leer.

No estoy muy seguro de que con “Chupa el perro” se aumentará y con qué calidad el promedio lector de los jóvenes en el país. Porque los conservadores del libro de papel y de los “temas serios” creen que con este tipo de espacios la Filbo se ha convertido solo en una feria, de comerciantes, de editoriales vendiendo lo que sea, “un mercachifle” como me dijo uno de los padres que sí está indignado con lo que pasó el sábado anterior en Corferias.

Pero tampoco creo que sea para pensar hasta allá. La Feria del Libro debe ser el espacio para todos, hasta para los  youtuber, aunque sí sería bueno que los papás y los colegios también les digan a sus hijos y estudiantes que con ese mismo lenguaje que permite los videos y en las nuevas tecnologías disponibles en sus tablets o smartphones, también pueden encontrar a los booktubers.

Y ahí se pueden enredar muchos, otro nombre raro pensarán. Lo cierto es que los booktubers son una tribu más reciente, de dos o tres años en el país, que hacen lo mismo que los otros, pero en lugar de comentar videojuegos o cómo estuvo su día, se dedican a ser una suerte de críticos literarios. A hablar de los 5 o 10 libros que se leen al mes y a crear quizá con razones de más peso, un verdadero hábito por la lectura que a muchos nos faltó.

En la Feria del Libro todavía están a tiempo para ir a escuchar a los booktubers. El sábado 30 de abril a las 2 de la tarde en la sala María Mercedes Carranza, será el conversatorio de Juliana Zapata, que es a la que mejor le va en Colombia con apenas 57 mil suscriptores en YouTube. Y un día antes, en la sala José Asunción Silva, estarán desde las 4:30 de la tarde otro grupo de booktubers. Para los que no vayan o estén por fuera, la revista Semana hizo una interesante selección de los que mejor lo hacen en el país para seguirlos en su canal.

Y en últimas, que en la feria de 2017 vengan más youtubers con más libros para los jóvenes, aunque siempre será mejor, en mi caso, ver a youtubers (Sí creo que lo son) como María Paulina Baena y compañía, contándonos en nuestro lenguaje una noticia importante de la semana en La Pulla y no a Germán hablándonos de alguna bobada que le pasó en el día.

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