Mi Opinión

Publicado el Ben Bustillo

Trump, Maduro y Uribe, los 3 reyes magos de la discordia

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Sus personalidades son similares cuando se trata del manejo de las masas: formando discordia, dividiendo creencias dentro de una misma línea de pensamiento, acusando dentro de los límites de legalidad, atropellando el núcleo débil del momento tratando de ganar notoriedad para sus causas que son nada más que personales alineadas con los de una naturaleza egocéntrica e intimidante con necesidad de elevar sus enfermizos razonamientos.

Lo peor de todo es que encuentran eco en grupos inconformes que varían en sus propios grados de percepción de los caminos de la sociedad en tiempos turbulentos. Es simplemente levantar la cabeza unos cuantos centímetros por encima del nivel normal para entrever las dificultades de todo tipo que se vive alrededor del mundo: China con la devaluación del yuan, Europa con el flujo de inmigrantes sirios y de todas partes de esa región, nuevo conflicto entre Colombia y Venezuela, Estados Unidos y su pobreza interna que viven ciertas de sus regiones.

Comenzando con Trump y su ataque a los latinos, especialmente a los mexicanos, sus sentimientos enfermizos cayeron bien dentro de los grupos religiosos evangélicos del centro del país, la derecha extrema con ideas bélicas conglomerados en los Estados de Washington y Oregón, incluyendo al famoso grupo de los Ku Klux Klan. Además de sus propias ideologías, todos estos grupos tienen también en común el pertenecer a la raza blanca.

Las posibilidades que tiene Trump de ganar la candidatura presidencial por el partido republicano en las próxima elecciones son altas en este momento, pero difícil de predecir sin analizar el costo al capital político que causaría este fragmentado partido. Por un lado tienen las ideologías del partido del té chocando con las de los tradicionales moderados, y además con las amenazas de Trump de correr independientemente.

Si esto último sucediese, podría significar la decadencia del partido republicano  reduciéndolo a una minoría, creando un nuevo partido político de otra minoría compuesto por la extrema derecha significando que la presidencia de ahora en adelante quedaría en manos de los demócratas comenzando con Hilary Clinton. Los demócratas nunca más podrían controlar ni el congreso o el senado, pero sí la presidencia. Para pasar leyes las alianzas se constituirían entre los republicanos moderados y  los demócratas.

Trump se define como hombre de negocios y su “reality show” en el que trata ser Presidente de Estados Unidos lo convirtió en el vocero de los disconformes de la raza blanca. Pienso que lo que anda buscando es más de un puesto de los disponibles a la banca conservadora y está presionando a los dirigentes de esta doctrina. La gran mayoría sabe que no tiene los rasgos políticos necesarios para ser presidente, pero lo más importante es que no cuenta con el apoyo del voto latino, fundamental para ganar la presidencia estadounidense.

Maduro, por el otro lado, es simplemente un oportunista que encuentra resonancia dentro de los soñadores de lo casi imposible, esperando que algo similar o de menor escala les pueda ocurrir. Su proceder con los compatriotas residiendo en el territorio disputado con sus contrincantes políticos venezolanos, no es más que una provocación para que sea respondida bélicamente. La diplomacia, no trabaja con las brutalidades de este individuo. ¿Qué otras alternativas además de la paciencia, se encuentran disponible? ¿Se le declara la guerra? Ciertamente los belicosos encontrarían este razonamiento lógico: se mata gente que ayuda a disminuir la súper población de la tierra y produce intereses económicos.

Otra alternativa sería lo que hacen los gringos que es el de atacar y matar a los cabecillas dirigentes de las milicias “terroristas” con drones o hace lo que hace Israel de atacar con todos sus armamentos bélicos a los palestinos. ¿Sería alguno de estos razonamientos los propios a seguir? ¿O sería más contundente averiguar las razones de su procedimiento?

Cuando mi proceso del pensamiento se encuentra en una encrucijada, recurro a ese espectro conocido y que utilizamos mucho los colombianos: nuestra malicia indígena. Indudablemente para mí, tengo que entrelazar el destierro o deportación de nuestros coterráneos de Venezuela, con las negociaciones con las FARC en Cuba. Se me hace que Maduro buscaba algún tipo de beneficio económico (más específicamente con las cantidades de dinero efectivo que tienen en sus manos los criminales de las FARC); quizás estaba esperando que hubiesen sido canalizados por medio de los mercados venezolanos. Una vez se firme la paz, Colombia se va a inundar con ese flujo de dinero en efectivo en dólares, bolívares y pesos colombianos que puede afectar favorablemente la economía de cualquier país. E indudablemente que las directivas de las guerrillas no comulgaron con la idea de utilizar los mercados bursátiles de Venezuela, porque Maduro no sabe manejar su economía y sería el despilfarro de sus ganancias criminales.

Pongamos que ese no fue el motivo específicamente, pero podría ser una de las razones. Pero de que tiene que ver algo con nuestro conflicto interno, tiene que ver. La conclusión que puedo sacar al porqué Santos se siente con las manos atadas para enfrentar al maniático es porque pondría en peligro la finalización de las negociaciones para la consecución de la paz con la beligerancia.

Con Uribe, la verdad que ya lo tengo tan trillado, que para no afectar mi presión sanguínea más de lo que está, voy a relatar un episodio familiar: Un primo hermano es anti uribista y una prima hermana que es abogada su simpatizante; el lazo sanguíneo es por parte de la familia de mi madre. A ambos, los he visto muy pocas veces en mi vida, pero con él he tenido más contacto personal. Con ella, creo que si la he visto una vez en mi vida, es bastante. Pero tuvimos un intercambio por medio de Facebook cuando murió mi madre. ¿Qué puedo decir? No todos tenemos los mismos conceptos cuando se refiere a esos lazos; y algunas veces, como en mi caso, las memorias son más fuertes que el razonamiento que conlleva el de la santidad maternal.

Recientemente mi primo escribió en Facebook su sentimiento en contra del mesías (Uribe). Pues para que fue eso; la prima arremetió en su contra en un idioma leguleyo que me imagino que su propio egocentrismo le impide realizar que su contribución a la defensa del maleante (Uribe) no es más que palabras inútiles sin valor jurídico y meramente una manifestación de baja calidad intelectual. Lo que sí se le notó fue ese sentimiento de superioridad que algunos sabemos que es simplemente el reflejo de su propia inferioridad. Prima, ya que tienes una base educacional del aspecto jurídico, lee en las demandas en contra de todos los participantes de su gobierno y el de los que se fugaron lo que se dice de San Álvaro, para que puedas opinar correctamente. El alejamiento familiar es precisamente uno de los efectos del manejo de las masas al estilo hitleriano que usa tu santo de devoción.

Ahora, ¿cuál es el mejor arma para manejar a estos disidentes? La paciencia. Fruta podrida se cae sola del árbol, pero a veces hay que estremecerlo para ayudar a su caída.

@realtor1986

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